OSASUNA 1 - OVIEDO 0
Osasuna ya tiene su copa de campeón
Era también día de despedidas, como las seguras de Carlos Cler y Miguel Olavide, la posible de Xisco y la incertidumbre de Robert Ibáñez y Rubén García.
Se vivió ayer en El Sadar otra noche de fiesta para poner el punto final a una temporada redonda. Tras haber celebrado con su afición el regreso a Primera, en esta ocasión, los rojillos celebraban con su hinchada el título de campeones de Segunda, después de hacer una temporada espectacular, logrando 17 victorias consecutivas en su feudo, mantenerse toda la temporada invictos en casa y convertirse en el mejor equipo local de la historia de Segunda División.
Era también día de despedidas, como las seguras de Carlos Cler y Miguel Olavide, la posible de Xisco y la incertidumbre de si Robert Ibáñez y Rubén García volverán a vestir la camiseta del equipo navarro. La afición rojilla reconoció el trabajo de Clerc, Olavide y Rubén García cuando fueron cambiados.
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Las vitrinas del estadio pamplonés aguardaban a la Copa de Campeones. Poco antes de las diez y media de la noche, cuando el árbitro del encuentro pito el final, jugadores y aficionados celebraban el título conseguido. Poco después los protagonistas se retiraban al vestuario, pero la fiesta no había hecho más que empezar. Tras unos minutos, uno a uno, los jugadores rojillos fueron saltando de nuevo al terreno de juego. El último en hacerlo, el capitán, Oier Sanjurjo, quien sobre las 11 de la noche, recibía de manos del presidente de la federación Navarra de Fútbol y Vicepresidente de la Real Federación Española, Rafael Del Amo, la ansiada copa. El capitán la elevaba al cielo de Pamplona entre la alegría de sus compañeros y una afición totalmente entregada, mientras sonaba el We are the Champions de Queen. La fiesta oficial finalizaba con la plantilla y cuerpo técnico de Osasuna dando la vuelta de honor a El Sadar y ofreciendo la copa que les acredita como campeones de Segunda a la afición.