Bussaglia, de descarte del Barça a fija en la seleccion francesa

Elise Bussaglia será una de las referencias de Francia en la medular. La mediocentro ayudará a Henry en el centro del campo para ayudar en la construcción y destrucción del juego. Una jugadora clave para Corinne Diacre, como se ha visto en la preparación para el Mundial. La francesa casi se queda sin Mundial. Porque, tras un año en el Barcelona, Lluís Cortés dejó de contar con ella y tuvo e emigrar para tener minutos y optar a la Copa del Mundo. En el pasado mercado invernal, Elise volvió a Francia y seis meses después será una pieza básica de Les Bleues. 

Bussaglia ha pasado por los mejores equipos del continente. Antes de recalar en el conjunto azulgrana jugó en el PSG, OL y Wolfsburgo. Sus ganas de aventuras la llevaron a abandonar Francia para conocer otras culturas y otro modo de vida. Elise aprovechó el fútbol para vivir experiencias que de otro modo hubiera sido imposible. Tras tres temporadas en Paris y otras tantas en Lyon, decidió cambiar de país. En Alemania aprendió la puntualidad y responsabilidad germánica. Dos años más tarde quería otro modo de vida y llegó al Barcelona. En su primera campaña de azulgrana, Bussaglia jugó 22 partidos, marcó tres goles y llegó a cuartos de final de Champions, además de levantar la Copa de la Reina. Sin embargo, la llegada de Hamraoui el pasado verano le relegó a un segundo plano. La también francesa, que no estará en el Mundial, se hizo con el puesto fijo en la medular de Lluís Cortés y Elise apenas contó con 27 minutos en toda la primera vuelta. Un descarte del conjunto azulgrana que decidió irse para tener minutos y poder llamar la atención de Diacre. Dicho y hecho. Sólo ha jugado 720 minutos en ocho partidos con el Dijon. Suficiente para que Corinne confie en la jugadora de Sedan. Ella, junto a Henry, comandarán el centro del campo galo.

Con cinco años, Elise iba a ver jugar a su padre y sus hermanos al fútbol. Hasta que un día faltaba un jugador y su madre le propuso que jugase ella. Se acostumbró a jugar entre niños, tanto que cuando empezó a hacerlo con mujeres no estaba cómoda. Con 15 años debutó en Primera y un año después se fue al centro de tecnificación de Clairefontaine, donde creció como futbolista. En 2004 fichó por el Juvisy, y ahí despegó su carrera. Pero Elise no vive sólo de fútbol. Estudió para ser maestra y, durante su etapa en el PSG, compagino su trabajo con los niños con la vida de una fútbolista profesional. Sabe que el fútbol no dura para siempre y detrás le queda su otra vocación, enseñar. Con 188 partidos como internacional, Bussaglia es un pilar de Les Bleues que quiere, al fin, llegar a esa final que se le resiste. Se quedó a las puertas en 2011 y también en los Juegos Olímpicos de 2012. En casa y ante su gente, Bussaglia quiere hacer historia. Un descarte del Barcelona que liderará a Francia...

"También queremos ser campeones del Mundo"

"Nosotros también queremos ser campeones del mundo. Nuestro viaje será muy diferente al de ellos. Escribimos nuestra propia historia. Esperamos poder levantar la copa al final de la competición", señaló Bussaglia días antes del estreno en la Copa del Mundo. La centrocampista también habló de la seleccionadora: "Corinne es alguien que trabaja mucho. Soy como ella Así que es fácil para mí llevarme bien con ella a este nivel. También es alguien que pone el nivel de exigencia muy alto, ya sea con ella o con nosotros. Así es como progresamos. Después, no siempre es fácil tener éxito en la vida cotidiana, pero tratar de serlo ya es enorme y eso es lo que nos pide. Durante dos años, se ha vuelto más y más abierta para nosotros y para la vida del grupo ".