El Sporting gana al Oporto la Copa de Portugal en los penaltis
Iker Casillas fue homenajeado en el primer gol del Oporto y se emocionó en la grada. El club del Dragão acabó subcampeón de los tres títulos portugueses en la temporada.
El Oporto de Iker Casillas vivió este sábado otra enorme desilusión. Tras una temporada prometedora, cuando el equipo lideró durante varias semanas la liga portuguesa, alcanzó los octavos de final de la Champions y a las finales de ambas copas locales, el club del Dragão acabó derrotado ante el Sporting en la tanda de penalti en la final de la Copa de Portugal (2-2 y 5-4), mismo destino ante el mismo rival que ya le había tumbado desde los once metros en enero, en la decisión de la Copa de la Liga. Tras la derrota de ayer, el Oporto acabó subcampeón de los tres principales títulos portugueses.
Fue un partido de infarto, que comenzó y terminó a toda velocidad y desbordando emoción. Una tarde donde Casillas fue homenajeado y donde los dos porteros brasileños, Vaná y Renan, brillaron bajo palos. El Oporto arrancó como claro agresor, algo comprensible por la importancia que este trofeo tenía para el equipo del norte de Portugal. Un título que ayudaría a curar varias heridas, tras haber perdido hace una semana la disputa por la liga con Benfica pocos días después del trauma vivido por el infarto sufrido por Casillas en un entrenamiento. Todo eso ante ante el mismo Sporting que, en enero, les había ganado en los penaltis la final de la Copa de la Liga.
Y el comienzo fue prometedor, primero con un remate a quema ropa de Otávio, en el minuto seis, que Renan paró con un movimiento de puro reflejo. Marega llegó a celebrar el 0-1 en el 22', tras un pase de Soares, pero la revisión del VAR anuló correctamente el tanto del franco-malinés, que estaba en fuera de juego. El gol del Oporto saldría en el 40', cuando Herrera centró para Soares que, dentro del área chica, remató de cabeza y celebró estirando la camiseta de Casillas que fue rodeada por sus compañeros en el centro del campo. El portero, en la grada, no escondió la emoción y, llorando, se levantó y dio las gracias. Pero cuatro minutos después brilló la estrella de Bruno Fernandes que empató con un tiro raso y potente desde la frontal del área.
El partido disminuyó de intensidad en la segunda parte y se fue a la prórroga. Cuando un fallo del futuro central del Atleti, Felipe, permitió que el Sporting remontara. El brasileño se equivocó a la hora de rechazar un centro y acabó asistiendo a Bas Dost que entraba en velocidad por el lado derecho del ataque sportinguista y remató de primera para marcar el 1-2.
Cuando el partido parecía decidido, cuando la prórroga ya estaba en el tiempo añadido, el Oporto fue al ataque a la desesperación y, tras dos rechaces en una pelota alzada, Felipe subió más alto que toda la defensa del Sporting dentro del área chica y marcó el gol que llevó el partido a la tanda de penaltis.
Bas Dost y Pepe fallaron un penalti para cada lado, ambos en el travesaño, y la decisión sólo llegó en los sextos designados. Fernando, del Oporto, tiró a media altura a la izquierda y Renan saltó como un gato para hacer la parada y vestirse de héroe. Phellype, con sangre fría y tranquilidad, marcó el quinto y último, el de la fiesta del título lisboeta. Fue el 17º trofeo de Copa del Sporting, que se pone segundo en el palmarés histórico de la competición, que tiene al Benfica como líder con 26 títulos.