1x1 del Málaga: Blanco Leschuk lideró la remontada

Munir: Al margen del gol de Biel, el internacional marroquí resolvió con seguridad y sin excesivos problemas el trabajo al que le sometió el Zaragoza. Sigue transmitiendo mucha seguridad en la portería. 

Cifu: Si ante el Oviedo cuajó su mejor partido, esta vez tuvo un mal día. Estuvo demasiado blando ante Pep Biel en la jugada del 0-1 y cometió un claro penalti sobre James Igbekeme al filo del descanso que el árbitro no señaló. 

Luis Hernández: Aprobado. En la primera parte la defensa estuvo algo imprecisa. Tras el descanso, el equipo creció y mejoró en todas sus líneas, también en la retaguardia. 

Pau Torres: Quizás le faltó algo de contundencia en el origen de la jugada del 0-1. Como el resto del equipo, mejoró notablemente en la segunda mitad. 

Juankar: Apocado en ataque en el primer tiempo, fue clave en la jugada del empate con un centro perfecto que Renato Santos convirtió en el 1-1. Estuvo cerca de hacer el 3-1, pero lo evitó Cristian Álvarez. 

N’Diaye: La baja de Keidi Bare le obligó a retrasar su posición. Ganó presencia y criterio conforme fue avanzando el partido, aunque en el rol de pivote apenas se dejó ver en ataque. 

Renato Santos: El portugués está más que consolidado en el once. Ante el Zaragoza jugó un papel clave en la remontada. Hizo el 1-1 con un sutil toque con la zurda. Su tanto espoleó al Málaga. 

Mula: Víctor le utilizó de interior por la baja de Keidi Bare y ahí el canterano no exhibió sus virtudes. Le costó recuperar balones y no tuvo mucha participación en el juego ofensivo del equipo. 

Adrián: Fue de menos a más. Sufrió junto a Mula para contener al centro del campo maño en la primera parte. En la segunda tuvo mucho más protagonismo, asistió a Blanco Leschuk en el 2-1 y cerró la victoria con un derechazo desde la frontal. 

Ontiveros: No marcó y no asistió, pero en sus botas se cimentó la reacción del Málaga. Estuvo en el origen de los dos primeros goles blanquiazules, no se escondió cuando el partido se complicaba y dejó muestras de su personalidad. 

Blanco Leschuk: Desdibujado en la primera parte, se agigantó en la segunda. Marcó el 2-1, comprometió en varias ocasiones a Cristian Álvarez y fue una pesadilla para los centrales visitantes. 

Dani Pacheco: No jugaba desde el 24 de marzo ante el Nàstic y tuvo media hora para ir ganando sensaciones. Puso el centro que acabó, tras un despeje, siendo el 3-1 de Adrián. El Málaga le necesita a su mejor nivel.

Iván Alejo: Tuvo poco tiempo. Entró al final y dejó algún que otro intento de desborde.