Dembélé, tranquilo: se libra ‘in extremis’ de la criba
El club comunicó al entorno del jugador que confían en él, que ha tenido “mala suerte” por culpa de las lesiones y que lo consideran un jugador franquicia del proyecto.
Ousmane Dembélé tendrá una vida extra al menos un año más en el FC Barcelona. Así se desprende tras la conversación que mantuvo una persona de su entorno con un ejecutivo de la entidad que le tranquilizó de cara al futuro, sobre todo tras la polvareda que se ha levantado en los últimos días como consecuencia de la humillante eliminación de la Champions ante el Liverpool.
Según parece en el club confían plenamente en las posibilidades del futbolista francés, al que consideran incluso un jugador franquicia del proyecto y con un potencial enorme para mejorar y explotar todas sus virtudes futbolísticas. Eso no quiere decir que no tenga detractores en el área deportiva que han subrayado su falta de profesionalidad en momentos puntuales y su fragilidad muscular que le han convertido en carne de enfermería estos dos últimos años.
Sin embargo, finalmente ha pesado más en la balanza los factores positivos que negativos, por lo que Dembélé seguirá un año más en la entidad blaugrana. De hecho, la apuesta que ha hecho el club blaugrana es muy grande -con una inversión de casi 130 millones en un jugador que acababa de cumplir 19 años- y se confía que sea capaz de revertir esta dinámica negativa en un futuro inmediato. Sólo hay que recordar que el propio presidente Josep Maria Bartomeu aseguró en una entrevista reciente que Dembélé era a día de hoy “mucho mejor jugador” que Neymar.
Está por ver si veremos aún a Dembélé esta temporada, ya que la única opción que le resta sería la final de Copa del Rey ante el Valencia el próximo 25 de mayo. A día de hoy parece todavía muy remoto que el jugador llegué a tiempo, sobre todo teniendo en cuenta sus antecedentes de recaída en los isquiotibiales, aunque la artroscopia sorpresa a la que se ha sometido Luis Suárez podría replantear los planes en el seno del club, máxime cuando ya no hay una final de Champions que disputar.
En todo caso, parece claro que el gran perjudicado de la apuesta del club por Dembélé será el brasileño Philippe Coutinho, quien además de arrastrar un rendimiento discreto esta temporada no cuenta con el beneplácito de una afición que ya le ha dedicado más de una sonora pitada en el Camp Nou.