El Espanyol de Brindisi en la 98-99 señala el camino al de Rubi
El conjunto perico logró descabalgar al Athletic de la séptima plaza en las tres últimas jornadas: para ello, sumó un pleno de nueve puntos.
Se resiste el vestuario del Espanyol, jugadores y cuerpo técnico, a descartar la séptima plaza —que muy probablemente dará acceso a la Europa League— a pesar de que el empate del lunes ante el Betis mermó las posibilidades de un conjunto perico que debería sumar seis puntos más que el Athletic en solo tres jornadas. La esperanza en una hazaña la pone la propia historia del Espanyol.
Se cumplen exactamente 20 años desde la última vez en que el conjunto perico terminó LaLiga en esa deseada séptima posición, la temporada 1998-99, que fue agitada, con la gran actuación estival de la Quinta de la Intertoto en el torneo del mismo nombre, la fuga de Marcelo Bielsa a la selección argentina en octubre y la llegada de su compatriota Miguel Ángel Brindisi. Con éste, pasó el Espanyol de "transitar por la cornisa" a falta de 12 jornadas, en el decimoquinto puesto, a merodear el séptimo ya a estas alturas, después de la jornada 35. Lo marcaba entonces el Athletic Club, con 54 puntos, dos más que la escuadra perica.
Los leones, entrenados por Luis Fernández, sumaron en los tres últimos partidos seis puntos, pero el Espanyol hizo el pleno de nueve y les superó en la clasificación, arrebatándoles esa séptima plaza que en aquella ocasión dio acceso a la Intertoto. 61 puntos del Espanyol por 60 del Athletic. Los de Brindisi, no en vano, encadenaron seis triunfos al final, con solo una derrota en las 12 últimas jornadas, un escenario este último similar al actual.
Y, como ahora, recurrió el Espanyol a canteranos como Capdevila o Sergio (Tamudo se fue cedido al Lleida en enero) junto al talento de Toni, Cristóbal, Nando, Pochettino, Helguera, Arteaga, Posse, Benítez...