Los penaltis no pitados en Anoeta indignan a Bordalás y a Antunes
El técnico y el jugador insinúan que hay una mano negra para que el equipo no entre en Champions. La nevera a Medié Jiménez no les resarce.
Las dificultades para entrar en Champions crecen para el Getafe, indignado por el arbitraje sufrido el domingo en Anoeta y, sobre todo, por el diferente criterio que se utilizó con el uso del VAR. Mientras Medié Jiménez avisó a Prieto Iglesias para que pitase el penalti de Djené, no le dijo nada sobre los cometidos sobre Hugo Duro y Mata.
Los azulones sospechan que alguien no quiere que un club tan modesto juegue la Champions: “Está claro que no quieren al Getafe donde está”, dijo Bordalás, expulsado por protestar esas dos acciones. Antunes, que lo vio por la Tele porque está lesionado, fue más contundente en sus redes sociales: “Muchos no quieren al Getafe en Champions. Poned al que queráis allí y que acabe el campeonato. Respeto, señores, respeto”. En la afición el malestar es enorme y se planea hacer alguna protesta que aún no se ha concretado, pero podría ser una pañolada antes de empezar el partido del próximo domingo en el Coliseum frente al Girona.
Hay un dato que indigna a los getafenses. Medié Jiménez va a la nevera la próxima jornada por su pésima actuación en el VAR el domingo. Tras la eliminación copera en Mestalla se le retiró la segunda amarilla a Djené que fue clave para el devenir final de eliminatoria. Se reconocen los errores, pero el Getafe no recupera los puntos del domingo ni está en la final de Copa. Todavía depende de sí mismo para ser cuarto, pero no hay margen de error y los nervios crecen.