Los 'cierres' de Caparrós, un aliciente para la Champions
El utrerano logró 13 puntos de 15 posibles en dos ocasiones en Nervión. La 2004-2005, espina clavada del técnico sevillista.
El Sevilla busca un cierre de temporada de récord para agarrarse al tren de la Champions League y el sello de Joaquín Caparrós debe ser su mejor aliado: el técnico utrerano firmó 13 de 15 puntos en dos ocasiones como entrenador nervionense en las cinco últimas jornadas y ahora pretende emular su mejor versión para conseguir la cuarta plaza.
A falta de cinco jornadas, el Sevilla tiene en Getafe y Valencia a sus máximos enemigos por esa plaza de Champions que a su vez supone el mayor desafío para Joaquín Caparrós, que tiene una espina clavada desde que en el curso 2004-2005 se quedó a las puertas de jugar la Liga de Campeones tras sumar cinco puntos en las cinco últimas jornadas. Fue, además, el curso que supuso su adiós a Nervión tras cinco campañas como técnico.
Clasificación | PTS | PG | PE | PP |
---|
Próximos partidos |
---|
Pero ese sprint final del 2005 no eclipsa los brillantes cierres de curso que protagonizó en el Sevilla. Cuando tomó los mandos del equipo, en Segunda, logró un 13 de 15 que garantizó el primer lugar, mientras que la temporada siguiente repitió esa misma estadística en Primera para dejar al equipo en una tranquila octava posición. En la 2002-2003, el Sevilla del utrerano logró siete puntos en las últimas cinco jornadas, una cifra que podría ser insuficiente este año para agarrarse a la cuarta plaza. Mejor fue en el curso siguiente, con un 10 de 15 que dio el billete a Europa y que confirmó el brillante despegue del proyecto que también comandaba Monchi desde la dirección deportiva.
La llegada de Caparrós logró un efecto exprés en el rendimiento del equipo en las últimas semanas en un reflejo casi idéntico a su aparición el pasado curso. Entonces, tras reemplazar a Vincenzo Montella en el banquillo, sumó en las últimas cinco citas la cifra de 10 puntos, suficientes para tener un sitio en la Europa League de esta campaña. El reto es ahora mayor: necesita una cifra récord para conseguir una plaza de Champions que también tumbe esa espina clavada del 2005.