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BARCELONA

Vidal, líder de recuperaciones en Huesca (12)..., y de actitud

El chileno demuestra el mismo compromiso en días grandes que en partidos de menos glamour. Sólo ha jugado 176' en Champions y apunta a suplente de nuevo el martes.

Arturo Vidal, en Huesca.
Juan Manuel Serrano ArceGetty Images

Pasados aquellos primeros meses en los que tuvo que aprender que fichar por el Barça después de haber estado en dos gigantes como Juventus y Bayern no le iba a garantizar la titularidad; después de aquellos inicios de extraños flirteos con los emoticonos de Instagram que le valieron incluso un reproche público del club tras su enfado por ser supente en Wembley ante el Tottenham, Arturo Vidal está dando el nivel en el Barcelona.

En Huesca, en lo que definió como un partido en el se mezclaron "adultos y niños", fue el jugador de campo del Barça que más balones recuperó (12). A Vidal no se le están cayendo los anillos para jugar partidos de primera ronda de Copa del Rey en León o el de este sábado en El Alcoraz, sin ningún glamour. Y le ha puesto la misma actitud en esos 90 minutos que para jugar un cuarto de hora en los dos partidos ante el Inter o en los 25 minutos del partido de Old Trafford del pasado martes, donde su salida y la de Sergi Roberto asentaron a un equipo intimidado por momentos por los empujones del United en los primeros minutos de la reanudación.

Por poner un ejemplo, Vidal sólo ha jugado 176 minutos en la Champions (sólo una titularidad) y, otro, no ha sido titular en ninguno de los cuatro Clásicos de la temporada. Aun así, y aunque sólo ha participado de los partidos ante el Madrid en 64 minutos, fue capaz de hacer un gol el día del 5-1 en sólo seis minutos de juego y tuvo 20 minutos clave en el partido de Liga de la segunda vuelta (0-1) para abrochar un partido que el Barcelona no terminaba de controlar. Acostumbrado a jugar partidos grandes toda su carrera, su rol en el equipo está siendo distinto. Sin embargo, su comportamiento es alabado por técnicos y compañeros. Lejos del polémico currículo que arrastra, ha aceptado bien su condición de suplente y pese a que su estilo de juego no responde con exactitud a las coordinadas del ADN Barça, su vigor y su mentalidad han conectado con la afición y empujan al Barça en un año en el que empieza a acercarse a los objetivos. Vidal seguirá sin ser titular ante el United el martes pero tendrá el mono de trabajo colgado en el banquillo para cuando Valverde le levante la mano. En el Camp Nou, en el Reino de León o en El Alcoraz. Eso también es sumar.