Álvaro Morata ya forzó en el Camp Nou y por él no va a ser

Morata lleva desde el lunes entre algodones para llegar al duelo contra el Celta. El ariete, con molestias en el tobillo derecho, realizó ayer una parte de la sesión al margen del grupo. Sólo queda la de hoy para poder reintegrarse totalmente. Por él no va a ser, como ya ha demostrado. Se presentó el pasado sábado en el Camp Nou, cuando lo fácil hubiera sido no arriesgar. En el partido previo ante el Girona se habían acuciado sus problemas en el tobillo y el parte médico dictaba un esguince. Pero desde el primer momento transmitió su deseo de ir al Camp Nou y así lo pactó con los médicos. Llegada la cita, se infiltró para poder aguantar el dolor y saltó al campo cuando lo decidió el Cholo. Tras el día de descanso, volvió con la intención de trabajar con el grupo, pero tras unos minutos el dolor persistía, por lo que se le pidió tomarlo con calma. Su compromiso ha seducido en el Atlético desde el primer momento y en estas horas, donde las bajas persiguen al equipo, Morata pone todo de su parte para arrimar el hombro.