Un gol de Carlos Castro deprime todavía más a Las Palmas
Su gol a los amarillos en el minuto 84 encamina la permanencia del Elche. Al final del partido se escucharon gritos de "¡Ramírez vete ya!".
Ante una UD Las Palmas en continua depresión, el Elche selló anoche virtualmente su permanencia tras el gol de Carlos Castro, y además empata con el equipo insular. No sale de una para meterse en otra la formación grancanaria, tan poco le ha durado el 'efecto Pepe Mel': ganó en Riazor para sumar dos derrotas consecutivas en casa, las primeras de la temporada, y empatar en Granada. El playoff ya no es ni una quimera. Este domingo se dejó otros tres puntos ante el aseado equipo de Pacheta, dulce como pocos en la salida de la pelota, paciente, justiciero cuando pudo.
En el primer tiempo se jugó precisamente a lo que quiso la formación ilicitana, enredada Las Palmas en su telaraña. Hubo una clara ocasión para cada uno, pero Javi Flores y Mir, se toparon con Raúl Fernández y Badía. El ambiente era excesivamente frío en la colina donde de Siete Palmas donde se levanta el Estadio de Gran Canaria, y solo la música de viento que se escuchaba desde la grada 'animaba' un partido insulso.
Valiente. Un valiente Pepe Mel lanzó un aviso en el descanso cuando dio entrada a Momo por el desquiciado y protestón, una vez más, Peñalba. Salió Las Palmas de los vestuarios con nuevos bríos. No le quedaba otra que ser impaciente. La iba la vida en este partido y el Elche, aplicado desde el inicio de curso, con la permanencia como único objetivo, no tenía tanta urgencia.
Llegaron los locales a arrinconar a los pupilos de Pacheta, pero con más corazón que cabeza. Tras una asistencia de Rubén, de nuevo Mir pudo adelantar a Las Palmas en el 61', pero Badía salió al quite, como después con el propio Rubén. Con los amarillos lanzados, Carlos Castro aprovechó un fallo de Raúl y Cala para hacer el 0-1 a puerta vacía, como vacía se queda la esperanza local de jugar los playoff. Su desastrosa temporada no merece, de momento, otra cosa.
Gritos de "¡Ramírez vete ya!" al final del partido
En los últimos instantes del partido, con el balón todavía en juego, la mayoría de los espectadores que quedaban en el EGC se unieron en un atronador "¡Ramírez vete ya!". Algunos espectadores se acercaron incluso a protestar al palco de autoridades. Se generó un pequeño altercado con la seguridad privada del recinto, pero por suerte el asunto no pasó a mayores.
Los aficionados volvieron a pedirle así al presidente del club que abandone la entidad, de la que es también su máximo accionista. Este semana, el propio Miguel Ángel Ramírez consiguió frenar una acción de la Federación de Peñas del club, que pretendía exhibir esta noche 15 pancartas con el lema "Ramírez vende ya".