Calleja: "He aprendido a que debes cambiar tú antes de que te cambien a ti"
El entrenador del Villarreal Javi Calleja habla en AS de su regreso al banquillo amarillo, de lo que aprendió tras su anterior despido y del presente inmediato.
¿Cómo y cuándo se le ocurrió lo de los tres centrales?
Lo de poner tres centrales se me ocurrió revisando los partidos de mi primera etapa. Estuvimos analizando tras la destitución lo que habíamos hecho y las decisiones que habíamos tomado, y entendí que esa hubiera sidouna buena opción para esta plantilla.
¿Volvió a revisar todos sus partidos una vez lo echaron?
Una vez fuera del club seguimos trabajando y nos reunimos todo el cuerpo técnico para analizar lo que habíamos hecho, vimos partido a partido todo lo que había pasado. Analizamos cosas que habíamos hecho bien, cosasque habíamos hecho mal y, buscamos soluciones a aquellas cosas que eran revisables y mejorables.
¿Qué más analizó en ese periodo?
Analizamos a los jugadores y las posiciones en las que habían jugado, su rendimiento, las opciones que teníamos, las que no utilizamos y, las que podríamos haber utilizado. Hicimos un estudio bastante completo para aprendery saber cómo reaccionar en el futuro.
¿Y eso no se pudo hacer cuándo estaba en el banquillo?
Sí que se hace, pero no es lo mismo que puedes hacer con mucho tiempo y la tranquilidad de no tener un partido cada tres días. En la temporada no tienes tiempo de profundizar, no hay margen para buscar y hacer un cambiotan grande como el de ahora. Teníamos una idea de trabajar y buscamos solventar errores, pero no vimos claro que debíamos hacer un cambio tan radical. Lo pensamos, pero no encontramos en momento o el tiempo exacto para hacerlo, es algo que se quedó pendiente.
¿Por qué siguió con el rombo si no funcionaba?
Puede que yo tuviera la idea de que la mejor manera de hacer rendir este equipo era el rombo, esa filosofa de ser más atrevido y, de arriesgar más, algo que nos ha hecho jugar bien y ganar partidos. Pero es verdad queeste año el equipo acusó los malos resultados y no pudo ganar cuándo fue superior, algo que debilitó la idea, generó desconfianza y eso nos hizo que el equipo no se sintiera reforzado con una idea de juego que nos había ido muy bien.
¿Sigue creyendo en ella o ya no?
Yo sigo creyendo que es una buena idea, pero el gran problema de esta temporada es que nos faltó efectividad; a lo que se sumaba que al arriesgar los contrarios nos hicieron daño con facilidad. No merecíamos perder,pero perdíamos a pesar de ser mejores y de jugar mejor. Eso nos pasó mucha factura mental, ya que los jugadores no ganaban y esta debía ser una temporada importante. Eso empezó a generar dudas, y esas dudas nos debilitaron mucho.
¿Lo que está claro es que el fútbol no entiende de largo plazo y de proyectos bonitos?
En el fútbol manda el día a día y no hay tiempo para esperar a largo plazo. A pesar de que la idea sea buena y que el proyecto sea bueno, de no llegar los resultados, hay veces que debes cambiar tú antes de que te cambien.De esta situación he aprendido que a veces hay que cambiar cosas antes de que te cambien.
¿Y en qué cosas ha cambiado?
Pues que lo importante es que el jugador se sienta protegido y que el futbolista este tranquilo y convencido de que lo que hace le llevará al resultado, y a partir de ahí crecer. En esta nueva etapa hemos buscado intentarganar confianza y seguridad, para sacar lo mejor de los jugadores por esa vía.
¿Y esa seguridad cómo se ha trasladado al campo y al juego?
Ahora tenemos un último central que da seguridad a los dos centrales, los carrileros se sienten más seguros con cada central de su banda, los del medio se sienten más seguros porque los de atrás están más seguros y,cuando nos reorganizamos, estamos más juntos y más tranquilos. Eso nos hace que el equipo se siente más protegido, y con esa seguridad le hace estar mejor. Se nota mucho en el campo y en los jugadores, algo que era prioritario.
¿Y ha llegado Iborra que para usted ya era la prioridad este verano?
Iborra era un tipo de jugador que sabíamos que nos podía dar mucho. La salida de Rodri, que era un jugador muy importante, nos daba mucho en esa posición y ya no lo teníamos. a esa baja se suman muchos problemas en esademarcación, lo que ha hecho que hayamos sufrido mucho en el centro del campo. Es verdad que esa era una posición crucial y que Iborra es muy importante, dentro y fuera del campo.
¿Qué más cosas que ha valorado desde su retiro antes de volver?
Pues que este año la categoría está muy igualada, puede pasar de todo y hemos visto muchos cambios en los banquillos. Ganar está siendo mucho más complicado, por lo que no empezar bien te generaba más ansiedad y angustia.Hemos pensado que se iba a solventar y han ido pasando los partidos y no era así, lo que todavía generaba más angustia. Todo eso nos hacía dudar y en vez de ser conscientes de que debíamos tener más tranquilidad, todo era catastrófico y todo el entorno estabamuy alterado. La verdad es que pensábamos que éramos mejores y en ese momento no lo éramos.
¿Entendió qué le echaran?
Entendí que me echaran, pero no lo compartí. Sabía mi parte de culpa y sabía que el máximo responsable es el técnico, eso es así y es lógico. Entendí que el club buscara otra solución, pero yo siempre he tenido muy claroque lo podíamos revertir.
¿Y lo del presidente y su llamada cómo le pilló?
Pues me llamó y me dijo que meditaba la opción de mi regreso, que era algo que pensaba él. Me preguntó si me veía con fuerzas y con lo necesario para aceptar el reto. Le dije que sí, que fuerzas todas las del mundo.Aunque le pedí que quería saber la opinión del vestuario y de los jugadores. Una vez supe que era positiva, decidí que debía aceptar por el presidente y por el club. Más que con la cabeza lo hice con el corazón, la clave es que el corazón me decía que teniaque volver y que debía intentar darle la vuelta a esto.
¿Y ahora cómo ve las cosas?
Sinceramente lo veo bien, lo veo muy bien. Pero somos conscientes de que quedan 30 puntos y eso es mucho, por lo que no hemos logrado nada todavía. Pero veo como trabaja y como respira el equipo, veo una familia dentroy eso me enorgulleces, me da mucha confianza. Veo que todos quieren salir de ahí, veo como sufren los que no juegan, como lo disfrutan y las ganas que tienen de salir de ahí abajo.