Luis Enrique decide arriesgar y Odegaard sale a escena
Noruega pone a prueba la atrevida revolución en La Roja. Busquets, único medio con más de 15 partidos en la Selección. Lagerbäck hizo ascender a Noruega a la Liga B en la Nations League.
La Eurocopa multinacional, cuya fase final se jugará en estadios de doce países diferentes, arranca hoy para España ante Noruega en Mestalla (sigue el partido en directo en As.com), uno de los campos de cabecera en otros tiempos, con más incertidumbres que enemigo. Luis Enrique ha convocado ya, en sólo seis partidos, a 41 jugadores y ha puesto en el campo a 32. En los 20 choques con Lopetegui no pasó de 51. El seleccionador ha movido mucho el árbol, apunte de que está más por el jugador del momento que por la guardia pretoriana.
Entre Koke, Thiago e Isco suman 114 partidos internacionales. El primero estuvo en los dos últimos Mundiales y en la Eurocopa de 2016. El segundo, en Francia y Rusia. El último, en el pasado Mundial. Los tres figuraron en alguna de las últimas dos convocatorias y los tres se han caído para esta doble cita ante Noruega y Malta. Y antes que ellos salieron, por razones de edad, Iniesta (131 partidos) y Silva (125).
El relevo, salvo Busquets, está verde. Saúl, llamado a última hora, sólo ha jugado quince partidos con la Selección; Ceballos, cinco; Rodrigo, cuatro; Parejo, uno, y Canales ni siguiera ha debutado. Los dos últimos tienen 29 y 28 años, respectivamente. En cierto modo se han visto tapados por una brillantísima generación anterior y les toca entrar en las duras.
No es la única decisión de alto riesgo. Luis Enrique ha ensayado ya con seis posibles sustitutos de Piqué. Con veteranos (Albiol) y noveles (Mario Hermoso). Ahora llega otro candidato: Sergi Gómez. Y arriba también le ha dado vueltas hasta acabar en Jaime Mata, debutante en Primera con 30 años pero autor de 13 goles en el Getafe. No es la primera opción pero ahí está.
La fórmula Lagerbäck
Enfrente estará Noruega, en clara inferioridad. Representa a un país de cinco millones de habitantes que se enfrenta a otro, el nuestro, con un millón de fichas de futbolistas. Menos donde elegir y menos tradición. Sólo ha estado en dos Mundiales y una Eurocopa. Nunca pasó de octavos.
Ahora anda en manos de un especialista en equipos nacionales, el sueco Lars Lagerbäck, 70 años y un largo historial en rehabilitaciones. Dirigió con éxito a Suecia nueve años, pinchó con Nigeria en el Mundial 2010 y firmó su gran obra con Islandia, clasificándola para la Eurocopa de 2016 y llevándola hasta cuartos tras eliminar a Inglaterra. Su termómetro para valorar el nivel de una selección menor es el número de jugadores instruidos en grandes campeonatos. Aquí tiene de todo. Si Luis Enrique llamó a futbolistas de 13 equipos, Lagerbäck cuenta con jugadores de doce campeonatos distintos.
De los de fuera, los ojos se clavarán en Odegaard, promesa que se ralentizó tras fichar por el Madrid y que ahora, tras pasar sin firmeza por el Heerenveen, triunfa en el Vitesse que dirige el exseleccionador ruso Slutski, que peleó por él todo el verano. Sólo se ha perdido un partido, por lesión, en todo el año y suma siete goles y seis asistencias. El Ajax le ve como sustituto de De Jong. Él se deja querer pero espera al Madrid: “Volveré en verano y veremos qué pasa”. Debutó con la Selección con 16 años, luego pasó un largo periodo en la Sub-21 y ahora retoma su carrera internacional. El Madrid queda atento a la pantalla.
Noruega, selección 48 del ránking FIFA, sólo ha perdido uno de sus últimos diez partidos y ha ascendido de la Liga C a la B en la Nations League. No es caza mayor ni cenicienta.