La afición del Chelsea se planta contra Sarri y vende sus entradas
La afición le ha dado la espalda a Sarri. No le gusta nada de él, ni mucho menos los resultados. Por ello están vendiendo sus entradas, por cientos, para los próximos partidos en casa.
A los aficionados del Chelsea parece que se les está acabando la paciencia con su entrenador, Maurizio Sarri. No les gusta haber perdido 2-0 el pasado domingo ante el Everton ni ser sextos de la Premier, a falta de ocho jornadas. Ni que el Manchester United les ganara en la FA Cup en Stamford Bridge. Tampoco les agrada el estilo de juego de Sarri, al que han bautizado "Fucking Sarri-Ball", algo así como "p*** Sarri-Ball".
Por eso la afición del Chelsea se ha plantado y como protesta está vendiendo sus entradas para ver al equipo. Parece haber un boicot organizado y bien planificado con el fin de poner contra las cuerdas a Sarri. Lo peor está por venir, ya que los aficionados se han propuesto vender sus entradas para los tres próximos partidos en casa.
El próximo partido en casa del Chelsea es el 3 de abril contra el Brighton. El club anunció la nueva fecha y en las siguientes 12 horas 150 aficionados pusieron sus localidades a la venta. Tampoco parece importarles que el choque del 8 de abril sea el derbi londinense contra el West Ham. Más de 400 abonados ofrecen sus localidades en el servicio de intercambio oficial del club. Cerca de 700 también vendieron sus entradas para la visita de Burnley el 22 de abril.
Pero no todo son sombras en el Chelsea, que se jugará el pase a las semifinales de la Europa League ante el Slavia de Praga. Sin embargo, la ilusión de los hinchas está por los suelos. La cantidad de entradas disponibles en el club para el partido de Europa League pone de manifiesto que la afición ha perdido la fe en su entrenador.