El sabor agridulce de Anuar
Marcó su primer gol como profesional al Real Madrid y recibió su primera convocatoria con Marruecos, pero el momento del equipo no le deja disfrutar de sus logros.
Dentro del momento duro que está viviendo el Real Valladolid, la situación de Anuar es la que llama al optimismo. El ceutí tiene un sabor amargo. Feliz por su convocatoria con la selección marroquí y su primer gol en Primera, nada menos que ante el Real Madrid, y triste porque el equipo no gana. El futbolista afirmó sentirse “muy feliz por la convocatoria, era un objetivo que buscaba desde hace tiempo, no ha sido fácil. Lo percibo como un premio y se lo tengo que agradecer a los compañeros, al entrenador, a todas las personas de la entidad blanquivioleta. Gracias a ellos soy lo que soy” aunque reconoció que “tras acabar el partido recibí muchísimos mensajes de felicitaciones por haber marcado al Real Madrid, pero por dentro yo estaba triste porque hubiese preferido no marcar y haber sacado los tres puntos. Lo hubiese firmado miles de veces. Estoy triste porque el equipo no consigue entrar en una dinámica positiva en la que podamos levantar la cabeza, sumar una serie de victorias con las que coger aire y esa confianza como para decir nosotros somos buenos jugadores y no lo estamos haciendo tan mal. Sólo es una cuestión de detalles y el fútbol no se está poniendo de nuestra parte”.
Anuar todavía se acuerda del partido ante el Real Madrid. “El inicio fue arrollador, si nos ponemos 2-0 tampoco hubiera sido extraño, la rabia fue que nada más ponernos por delante y por un error nos empatan rápido sin hace nada. Eso nos produjo mucha impotencia y luego el penalti te da mucha tristeza porque es un partido que lo podíamos haber sacado” y reconoció que sufrió penalti en el inicio de la segunda parte: “Con el control entro, me sale Courtois y me clava los tacos en todo el pie, tengo unas heridas, y pensé que lo iban a mirar en el VAR, para mí fue penalti claro” y quiso mirar hacia adelante: “Estamos en una nueva semana, hay que pensar en el Eibar y debemos pensar en ellos”. El canterano negó que el vestuario esté hundido: “Quedan muchísimos partidos, todavía tenemos que ir a campos contra rivales directos, faltan muchos partidos en Zorrilla y estamos confiados en que podemos sacarlo adelante. Creemos en ello y confiamos en ello. Tenemos que trabajar juntos y volver a ser ese equipo que ha competido ante grandes equipos y que lo ha hecho muy bien en gran parte del campeonato”.
El canterano reconoce que “lo que está fallando es el bloque defensivo fuerte, al principio si lo teníamos, no nos hacían un gol, pero no los marcábamos. Ahora nos están haciendo gol, lo más importante y principal tenemos que hacer un bloque fuerte en el que el primer objetivo es defender fuerte, unidos todos y salir rápido y aprovechar las ocasiones que tenemos” y afirmó que “sabíamos que no iba a ser fácil” y “a día de hoy no estamos en descenso y lo tenemos en nuestra mano para poder sacarlo”, para terminar: “Esto lo vamos a sacar todos juntos”.
El domingo, el Real Valladolid juega en Eibar, partido difícil: “Es un equipo complicado, no tiene miedo, Mendilibar les dice a los suyos que vayan hacia arriba, que presionen arriba. Ya lo hicieron aquí y lo harán en su campo, juegan más en campo contrario. Mucho balón aéreo, pero con esa presión tan alta, si tenemos un buen día y conseguimos estar bien con balón, esa presión la matas y podemos crear ocasiones claras. Tendremos que estar muy concretados y con muchas ayudas, pero sacar los tres puntos allí nos daría mucho aliento”.
Por último, el jugador pucelano reconoció que ha hablado con el seleccionador marroquí, Hervé Renard: “Tuve un pequeño acercamiento en el que me explicó que quiere ver a gente nueva, jugadores jóvenes que están emergiendo, la selección tiene grandes jugadores, algunos de ellos brillando en la Champions, y va a más. Para mí es un gran paso deportivo”.