Firmino y Mané sostienen al Liverpool: a un punto del City
El Burnley se adelantó con un gol de Westwood (5’), pero el Liverpool supo rehacerse con los de Mané y Firmino (2). Gudmundsson puso emoción en el 91’ y Mané, la calma.
Hasta hace nada, el Liverpool tenía un halo de invencibilidad que metía mucho miedo en la Premier League. A día de hoy, cualquier equipo salta al campo contra los reds con la idea de que puede rascar algo. Eso mismo le pasó hoy al Burnley en Anfield, ya que a pesar de que se marchó derrotado hubo muchos tramos del partido en los que dio la impresión de que era capaz de llevarse el encuentro. Firmino, que marcó dos, y Mané, otros dos, fueron capaces sin embargo de darle la vuelta al tanto inicial de Westwood.
Los clarets se adelantaron gracias a un tanto olímpico espectacular del centrocampista inglés a los ocho minutos, aunque es cierto que existe falta en el inicio de la jugada por la obstaculización de Tarkowski a Alisson. El tanto no debió subir al marcador, pero los locales se estaban viendo en ese momento a cuatro puntos del Manchester City. Los de Klopp reaccionaron pronto gracias a un tanto con mucha fortuna de Firmino, que se aprovecha de un lío ente la defensa y el portero tras una internada de Salah para anotar el 1-1.
Un nuevo lío en la salida de balón de los de Sean Dyche, que se van metiendo en un embrollo tremendo unos a otros, terminaría dejando el balón muerto en los pies de Mané dentro del área, que no se lo pensó a la hora de colocar el balón en la escuadra de Heaton con un golpeo seco.
El partido lo terminaría matando Firmino, que se encontró con un nuevo balón muerto en el área para cerrar un encuentro que ni mucho menos fue cómodo para los reds pero que le permite mantenerse a un punto del Manchester City, un resultado que les permite respirar en Inglaterra a las puertas de visitar Múnich para la vuelta de los octavos de la Champions League.
En el descuento del partido Gudmunsson recortó distancias, pero Mané, que recibió tras un pase de Sturridge, que estaba en fuera de juego, regateó a Heaton en el 93 y no dejó lugar a la especulación.