REAL SOCIEDAD - ATLÉTICO DE MADRID
Griezmann y el reto de Anoeta
El Atlético juega allí esta tarde (18:30, beIN LaLiga) suma tres derrotas en cuatro partidos en San Sebastián ante un Real Sociedad renacida con Imanol.
De la Real Sociedad que conoció Griezmann ya sólo queda Zurutuza. La última Real que ascendió a Primera. La que jugó aquella fase de grupos de Champions, que recordará siempre el gol de Antoine al Lyon. Cinco años después, lo dicho, queda Zurutuza. Hasta Anoeta es otro: sin pista de atletismo, la grada cerca, casi encima, sólo un fondo ya le falta. Empuja. Y con Imanol se está notando (sigue el partido en directo en As.com).
Porque la Real, con su regreso tras la destitución de Garitano, no pierde. Ocho partidos e invicto (cuatro victorias y cuatro empates). Hasta en casa la historia es otra. Hasta 2019 no llegó la primera victoria en casa (ante el Espanyol). Desde entonces no perdió. Sus dos últimos partidos, dos victorias.
Y al Cholo, precisamente, últimamente Anoeta es un campo que se le atraganta: tres derrotas en sus últimas cuatro visitas. La última, la del año pasado, además dura, 3-0. Januzaj, entonces pesadilla, hoy no estará, lesionado. Tampoco Moyá. Rulli le ha echado el candado a su puerta, al estilo de Oblak. Será un duelo hoy.
Sin Costa ni Kalinic, lesionados, viajó el Cholo. Y con la duda del cuatrivote (Thomas con Saúl, Rodrigo y Koke) hasta ayer, que probó con Lemar, que tendrá otra oportunidad, quizá con un ojo en Turín. Ayer LaLiga se fue un poco más, en el Clásico, con la victoria del Barça, escapado a 10 puntos.
Grizi le ha hecho cuatro goles a la Real desde que se fue y Morata dos en cuatro partidos con el Madrid. Willian José, renacido en 2019, seis goles, ha hecho tres al Atleti. El muro Llorente-Navas se medirá a unos, el de Giménez-Godín debe contener al otro. Regresa Juanfran. Sigue Filipe. Y ojo. No sólo porque es de nuevo Filipe, sino porque a la Real le ha hecho gol en los últimos tres partidos.
En el lateral izquierdo de Imanol alguien que pudo ser Filipe: Theo, que vuelve tras sanción. No se reencontrará con su hermano, sigue lesionado, pero el viento del norte le sienta bien: recuerda a quien fue en Vitoria. Y a su peligro le suma un añadido: Imanol le está enseñando a defender. Será una amenaza. Como Zubeldia, despliegue y reparto de balón, un mariscal en el centro. Es fundamental. Como Zurutuza. Griezmann sabe.