Fin a la etapa de Herrero en el Murcia; Viadero, a un paso
El Consejo de Administración anunciará este miércoles el cese del técnico andaluz. El ex del Racing de Santander es la primera opción de Pedro Cordero, director deportivo grana.
El duelo ante el San Fernando fue el último de Manolo Herrero al frente del banquillo del Real Murcia. El Consejo de Administración grana decidió ayer, aunque lo anunciará hoy, el cese del técnico andaluz. Así se pone fin a una etapa en la que Herrero no es el culpable de la situación que vive el primer equipo, pues todo es consecuencia del caos institucional que acompaña al club de Nueva Condomina, especialmente desde el pasado verano. En aquel momento se hizo una plantilla para el ascenso, con jugadores de alto coste y superior categoría pero sin posibilidad de afrontar los gastos, lo que conllevó que hasta ocho jugadores se marchasen en el mercado de invierno.
Tras el adiós de Herrero, al que a última hora de anoche se le comunicó su despido, y con el playoff como una “hazaña”, como lo definió el ya ex entrenador murcianista tras el empate ante El Ejido, Pedro Cordero tenía claro quién debía ser el sustituto. Aunque había varias opciones, siempre apostó por Ángel Viadero. Y el nombre fue aceptado por un Consejo de Administración, que ahora sí se dejó llevar por el criterio del director deportivo.
Viadero tiene una dilatada experiencia en los banquillos de Segunda B. Empezó en el filial del Racing de Santander y pasó posteriormente por Ponferradina, Eibar, Pontevedra, Noja, Sestao River, Burgos y el primer equipo del Racing de Santander. En El Sardinero fue su última experiencia antes de aterrizar en la capital del Segura. En la primera campaña cayó en la ronda final por el ascenso ante el Barça B y en la segunda fue cesado en la jornada 24.
Con las eliminatorias de ascenso prácticamente descartadas, salvo giro inesperado en el apartado deportivo, el reto del Real Murcia de Ángel Viadero será poder clasificarse para la próxima edición de Copa del Rey, lo que daría opción de ingresos extra para la maltrecha economía murcianista. Es un objetivo menor para lo que se había fijado al inicio de campaña, el ascenso, pero que ahora no parece tan fácil. Es más, se mira con miedo a la zona baja de la clasificación por la dinámica negativa del Murcia