1x1 del Barcelona: sin los goles de Messi o Suárez no hay paraíso
El equipo blaugrana llegó a rematar hasta en 25 ocasiones a la portería del Lyon, pero no supo concretar ninguna. La clarividencia de Busquets, lo mejor del partido.
Ter Stegen: El portero alemán tuvo dos intervenciones espectaculares en la primera parte. Una tras un error garrafal a la hora de dar salida al balón al que supo reponerse con una gran parada al remate de Aouar y la segunda mucho más brillante visualmente, volando por los cielos para desviar el balón lo justo a un remate durísimo de Terrier desde fuera del área. En la segunda parte fue un espectador más.
Semedo: Espectacular partido del lateral portugués. Rápido y contundente a la hora de frenar las subidas de Mendy. Le faltó, por ponerle un pero, un poco más de ambición a la hora de subir por la banda.
Piqué: En su línea desde que empezó la temporada. Un encuentro perfecto de principio a fin. Y eso que la altura y el físico del rival le obligaron a hacer un plus sobre todo en las jugadas de estrategia. Excelente en la anticipación y brillante en la salida de balón.
Lenglet: Gran partido del central francés que estuvo siempre atento para hacerle las coberturas a Jordi Alba cuando subía al ataque. Está claro que a este nivel Umtiti va a tener muy difícil recuperar la titularidad.
Alba: Casi todo el juego ofensivo del equipo pasaba por el lateral izquierdo. Tal vez se llega a abusar demasiado a la hora de proyectar el juego hacia la banda izquierda del equipo. En cualquier caso dio tres asistencias que estuvieron muy cerca de acabar en gol. De hecho, hasta probó fortuna desde fuera del área, con escaso acierto, todo hay que decirlo.
Sergio Busquets: El mejor del Barça con diferencia. Un partido para enmarcar. Rozó la perfección a todos los niveles. Exquisito en la conducción y a la hora de ver pases entre líneas, se atrevió hasta mirar a puerta en dos ocasiones, poniendo a prueba al portero rival. Todo lo que hizo tuvo criterio de principio a fin.
Sergi Roberto: Valverde le ubicó como interior derecho, una posición en la que jugó en sus primeras temporadas en el primer equipo. Cumplió con creces en todas las facetas en el campo. Recibió un codazo en la boca que le hizo jugar con sangre buena parte del partido.
Rakitic: Hacía tiempo que no veíamos un partido tan completo del croata. Se puso el mono de trabajo para frustrar cualquier transición del rival y estuvo muy atento para guardar las espaldas de Alba. Sólo le faltó probar más fortuna desde fuera del área. Lo intentó en una ocasión y estuvo a punto de batir la portería del Lyon.
Messi: Uno ya perdió la cuenta de las ocasiones erradas por el crack argentino, que pese a estar embotellado en el centro supo revolverse en más de una ocasión y crear peligro en el área rival. Estuvo especialmente gris en los lanzamientos de faltas: tuvo dos en una posición inmejorable, pero una envió fuera y la otra cayó mansamente en las manos del guardameta. Se le vio más dinámico que en los últimos partidos, participando en la mayoría de jugadas ofensivas del equipo y hasta recuperando balones.
Luis Suárez: Lo del charrúa y los partidos jugados fuera en la Champions es ya un caso digno de estudio. No es normal que un delantero de su talento lleve tres años sin marcar fuera del Camp Nou en esta competición. Ante el Lyon otro repertorio de errores y fallos de cara a puerta que se acercan más a lo sobrenatural que otra cosa. Sigue dando una de cal y otra de arena en el área, capaz de lo mejor y de lo peor en un minuto. Está claro que esta sequía goleadora tiene que llegar a su fin porque no se puede fallar más en un partido.
Dembélé: Empezó enchufando, con una ocasión manifiesta a los veinte segundos de empezar el partido tras una gran asistencia de Busquets. A veces jugaba a una marcha superior a sus compañeros, con incursiones un tanto atolondradas, pero poco a poco está recuperando su mejor versión. Tuvo otra ocasión de marcar tras un excelente recorte, pero envió el balón al muñeco.
CAMBIOS
Coutinho: Entró por Dembélé cuando faltaba poco más de veinte minutos para acabar el partido. Dibujó alguna combinación interesante entre la telaraña defensiva del Lyon, pero sin acabar de rematar ninguna jugada. De hecho, el gol más claro que tuvo en sus botas con un balón manso que le llegaba al centro del área se lo acabó quitando Luis Suárez ante el rostro circunspecto del brasileño.
Arturo Vidal: El chileno saltó al campo por un mermado Sergi Roberto que además acababa de ver una amarilla por lanzar un balón a la gradería cuando el partido estaba parado. En los pocos minutos que estuvo en el campo dio fuerza y agresividad al equipo. De hecho, el Lyon apenas pasó del mediocampo.