Bárcenas acentúa las diferencias
Un cañonazo del panameño le da la victoria al Oviedo, superior a un pobre Tenerife, en el Tartiere, que celebró el segundo triunfo carbayón seguido en un productivo 2019.
Vistos los méritos de ambos, la renta se antoja escasa. Pero el cañonazo de Bárcenas, lustrosa ejecución, es una acción digna de tres puntos, los primeros del año en el Tartiere que van directos a engordar las arcas azules. El Oviedo fue superior a un pobre Tenerife, sin alma fuera de casa. Los tres puntos, el gesto de Bárcenas, premió al equipo que más a gusto se sintió en el campo.
El Oviedo, que repetía fórmula tras el buen resultado de Soria con la novedad de Joselu de estile ofensivo, saltó al campo dando continuidad al final afortunado de Los Pajaritos. El juego se instaló en el campo del Tenerife, óptima noticia para los intereses azules. Omar Ramos fue el primero en soltarse: conducción en la frontal y latigazo, que chocó con el larguero tras rebotar en un rival. El Oviedo, virtud incuestionable en Segunda, era dueño de cada balón perdido.
El dominio encontró premio a los 22 minutos. La presión azul desembocó en un rebote a los pies de Bárcenas. El panameño controló en la frontal y, ante la falta de soluciones más productivas, tiró de la vía directa: su derechazo lejano se coló en la escuadra como un misil.
Al tanto azul le siguió una mala noticia. Otra más relacionada con el departamento médico. Omar Ramos cayó al suelo rendido: se había lesionado. En el calentamiento había hecho lo propio Viti, con lo que el gafe también ha acompañado al equipo en el cambio de año. El Oviedo se destempló con la sustitución y el Tenerife empezó a crecer con la pelota como aliada. Los últimos quince minutos del primer acto fueron visitantes. Montañés echó a las nubes un servicio franco de Malbasic. Y el serbio probó con la zurda la flexibilidad de Champagne desde la frontal.
Los de Anquela recuperaron la chispa inicial en el impuslo que sigue al descanso. Otra vez presión alta, otra vez llegadas. Carlos peinó con demasiado ímpetu una falta lateral ejecutada por Bárcenas. A continuación. Javi Hernández se encontró una pelota suelta en el área, por dos veces, pero Dani Hernández respondió a sus zurdazos.
Poco se supo del Tenerife. Tampoco una vez que el partido entró en letargo, satisfecho el Oviedo con el resultado e incapaz el conjunto insular de inquietar a Champagne. Solo Carlos Ruiz intentó la réplica en un remate con escasa malicia. Insuficiente bagaje para llegar a inquietar a un Tartiere que celebró el segundo triunfo carbayón seguido en un productivo 2019.