Buffon admite que fue un ultra de joven: "Cometí muchas cagadas"
El portero del PSG contó en Vanity Fair los difíciles momentos que atravesó al comienzo de su carrera en la Juventus: "Fue el momento de renunciar o de enfrentar las inseguridades", añade.
Gianluigi Buffon, portero del Paris Saint-Germain, ha asegurado que sufrió una depresión al principio de su carrera y que una vez causó baja en un partido de la Juventus debido a un ataque de pánico. Además también revela algunos pasajes de su juventud, cuando fue un aficionado radical del Carrarese.
"Durante mi juventud me sentía omnipotente e invencible. Me sentía indestructible, que podía hacer lo que quisiera. Una sana locura que tengo presente y que me llevó a cometer varias cagadas. Me alegro de no haberlo olvidado. Pero nunca me drogué", dice en Vanity Fair. "Conocí a gente de la que se habla mucho pero se sabe poco, chicos normales, soñadores, algunos interesantes, algunos idiotas. Como aficionado del Cararrese, el nombre del grupo era Comando Ultrà Indian Tips. Llegué a imprimirlo en mis guantes", admite.
A pesar de los éxitos cosechados a lo largo de su carrera, Buffon atravesó momentos difíciles, sobretodo al comienzo de su carrera en la Juventus. "Durante unos meses, todo dejó de tener sentido. Parecía que a nadie le importaba. Era como si todos estuvieran preguntando por Buffon y nadie sobre Gigi. Fue un momento muy difícil", dijo el portero en Vanity Fair.
"Tenía 25 años y estaba en una ola de éxitos, pero un día, antes de un partido de la Serie A, fui a Ivano Bordon, el entrenador de porteros, y le dije "Ivano, dile a Chimenti (segundo portero) que caliente y juegue. Yo no me siento capaz de hacerlo. Había sufrido un ataque de pánico y no estaba en condiciones de jugar el partido", indicó el guardameta.
Sin embargo, Buffon asegura que era importante que la situación llegara a este punto, ya que eso le permitió avanzar: "Tenía claro que era un momento decisivo entre renunciar o enfrentar esas inseguridades que todos tenemos. Nunca tuve miedo de mostrarlas ni de llorar, algo que me pasa y que no me avergüenza en absoluto".