La última extravagancia de Marcelo Bielsa en el Leeds
El técnico ha instalado cama y cocina en los campos de entrenamiento para ser el primero en llegar a las sesiones y evitar el tráfico de la ciudad.
Siempre fiel a su apelativo, Marcelo Bielsa ha vuelto a sorprender al fútbol inglés con una de sus habituales extravagancias. La última ocurrencia del Loco ha sido instalar una cama y una cocina para poder pasar la noche en el campo de entrenamiento del Leeds United.
Con el equipo liderando la Championship (con un punto de ventaja sobre el Norwich -segundo- y seis sobre el Albion -tercero-), parece que los dueños de los Whites están dispuestos a plegarse a los caprichos del entrenador argentino con tal de conseguir el ansiado regreso a la Premier después de un periplo de 15 años por los infiernos del fútbol inglés.
De sus jugadores lo controla todo, desde que suena el despertador hasta que se encierran en sus casas tras otro día de duro trabajo. Bajo su tutela, la plantilla está sometida a una severa disciplina. Agosto fue especialmente duro: no disfrutaron de un solo día de descanso y les retiró la cerveza; desde pretemporada, los médicos les pesan y calibran su estado de salud cada mañana, comen al menos dos veces al día y es el propio Bielsa quien organiza las rutinas de gimnasia de los jugadores. Además de sus peculiares métodos tácticos, el técnico está obsesionado con la altura de la hierba en los campos de entrenamiento, donde obliga a que las porterías estén suspendidas del suelo para que todo el césped reciba la misma cantidad de luz solar. Bielsa en estado puro, el mismo que sigue cada partido del equipo sentado en un cubo azul en la zona técnica .
Al llegar a la estación de tren de Leeds en la década de 1970, los viajeros eran recibidos por un cartel que rezaba: "Promised Land — Delivered". De momento, los caprichos del Loco van dando resultado en Allan Road, donde el regreso a la Tierra Prometida está más cerca.