FINAL LIBERTADORES | RIVER 3 - BOCA 1
La Puerta del Sol se tiñó de rojo y blanco tras el triunfo de River
Tras la victoria "millonaria" en el Bernabéu, cientos de hinchas se desplazaron a Sol para celebrar la conquista de su cuarta Libertadores.
Un nutrido número de aficionados del River Plate acudieron a la Puerta del Sol de Madrid para celebrar el título de la Copa Libertadores conquistado por los suyos después de imponerse por 3-1 al Boca Juniors en el estadio Santiago Bernabéu.
Tras el triunfo en un apasionante duelo, marcado por la tradicional rivalidad existente entre los dos conjuntos, algunos de quienes lo presenciaron en directo pusieron rumbo al lugar de encuentro establecido para festejar en el caso de que hubiese razones para ello.
Es por ese motivo que desde la boca de metro de Callao iban emergiendo personas vistiendo el rojo y blanco de club y uniéndose a una fiesta donde se mezclaban con otros que no habían podido conseguir entrada, con medios de comunicación y con curiosos de diversas nacionalidades que buscaban formar parte de ese momento de alegría colectiva.
Al ritmo de los bombos, las gargantas se desataron para entonar diversos cánticos de apoyo a la entidad 'millonaria' así como de crítica al contrario, todo ello de manera tranquila y con la policía atenta aunque sin tener que intervenir.
Entre el grupo se encontraba por ejemplo Ariel Díaz, quien aunque satisfecho lamentaba no haber podido levantar el trofeo en el Monumental: "No fue bueno, me hubiese gustado ganarla como local en la cancha del River Plate como lo merecíamos. Pero ha sido hermoso conocer el Bernabéu, ganar la Copa Libertadores al Boca Juniors aquí. Madrid es hermoso y España es un país lindo pero lo ideal hubiese sido jugar el partido en Argentina".
Contentos estaban también Andrés y Juan Francisco Cantelmi, padre e hijo. Así lo explicaba el primero: "Es la alegría deportiva más grande de mi vida. Ya viví otras Copas Libertadores, todas en Argentina, pero nunca contra el Boca Juniors y con todas las condiciones particulares que tiene esta". En la misma línea se expresaba su progenitor: "Tengo setenta y cuatro años, mi pasión es el River Plate. He estado en todos los acontecimientos deportivos donde hubo grandes triunfos y nada, absolutamente nada, es comparable con esto".
Andrés destacó el gran esfuerzo realizado: "Que haya sido fuera de Argentina le da una épica especial. Viajamos más de once mil kilómetros, tuvimos que dejar a nuestra familia y hacer un montón de cosas para poder venir a verlo a pesar de haber ido sábado y domingo, las dos veces que se suspendió el partido. Ganarle al Boca Juniors con todo eso... Es una experiencia entre padre e hijo que no se va a olvidar nunca, esto es imborrable".
"A Madrid hemos venido muchas veces de turismo pero esto es otra cosa. Esta vez vinimos a algo específico. Veníamos a la gran frustración o a la gran alegría. Y se dio la segunda", comenta Juan Francisco a EFE.
La decisión de trasladar el encuentro a otra ciudad llegó después de los actos violentos que precedieron al choque que estaba previsto en el Monumental: "En Argentina somos un montón y el día de los incidentes en la cancha había sesenta y seis mil personas, toda gente normal salvo un puñadito muy pequeño que no va a alentar al River Plate sino que va a hacer otra cosa. El hincha normal somos nosotros que festejamos, celebramos y nada más".
Ambos retornarán a su tierra natal al igual que otros muchos que han completado un largo trayecto para disfrutar de uno de los enfrentamientos más importantes de la historia del club. Nadie sabe qué le deparará el futuro a su equipo pero, pase lo que pase, Madrid quedará para siempre en su memoria.