Drogba: "Pude jugar en Madrid o Barcelona; no diré cuál"

Didier Drogba (Costa de Marfil, 1978) acaba de colgar las botas en su último equipo en EE UU y ya es embajador del Chelsea y de Yokohama, su principal patrocinador. Después de 20 años de carrera hace balance y echa la vista atrás como uno de los mejores delanteros que ha sido.

-¿Cómo es la vida de Drogba una vez retirado del fútbol?

-Ocupada (risas). Es diferente de cuando uno es jugador. Entonces te enfocas en los entrenamientos, los partidos, los viajes, la condición física… También haces cosas para sponsors y marcas comerciales, pero principalmente trabajas para ti. Ahora soy embajador del Chelsea y de Yokohama, su patrocinador oficial. Estoy visitando países, he estado en varios lugares en muy pocos días: India, Tokio, Lyon, Madrid…

-Jugó 20 años al fútbol, ¿qué balance hace?

-Tuve una gran carrera, una gran vida. He tenido la suerte de jugar con muy buenos futbolistas, también de enfrentarme a ellos, talentos increíbles. El fútbol me dio la oportunidad de viajar por el mundo, de conocerlo mejor. He aprendido de diferentes culturas y gentes. Me siento afortunado por ello.

-¿Cuál fue su mejor momento?

-Hubo bastantes, es difícil sintetizar 20 años en uno solo. Quizá clasificarnos para un Mundial con Costa de Marfil, por lo que supuso para mi país. También mi primer gol con el Marsella y por supuesto la Champions ganada con el Chelsea. Son momentos inolvidables.

-Dice que tuvo “una gran vida” y como suele ocurrir con todos los nacidos en África jamás olvidó sus raíces. Etoo lo resumió con aquella célebre frase: "Correré como un negro para vivir como un blanco”…

-Jugamos al fútbol y al mismo tiempo tratamos de representar al continente africano de la mejor manera. La gente de África hablamos de nosotros mismos como si fuéramos un solo país, pero en realidad el territorio es mucho más grande. Hay mucho talento. Por supuesto también en Europa y Sudamérica, pero es cuestión de tiempo que la dimensión del fútbol africano crezca. Ahí están en la actualidad los Aubameyang, Sadio Mané, Salah…

-¿Es posible ver a un país africano ganando un Mundial?

-Sí, claro que es posible. Será más fácil cuando África tenga más representantes en el torneo. Cuantos más representantes tiene un continente en un Mundial, más opciones posee de que uno de ellos salga campeón. Es simple.

-Usted abanderó una generación marfileña inolvidable, pero no pudieron ganar la Copa de África.

-Estuvimos cerca. Es una pena, pero al mismo tiempo fue un orgullo pertenecer a ese grupo de jugadores. Sólo unos meses después de mi retirada internacional acariciamos el título. Hubiera sido la guinda a la trayectoria de aquella selección.

-Jugó en algunas de las mejores ligas de Europa (Francia, Inglaterra, Turquía…), pero nunca en España. ¿No tuvo la posibilidad?

-Hubo oportunidades en algunos grandes clubes de la Liga, sí. Los más grandes.

-¿Madrid o Barça?

-No diré el nombre (risas), pero era un momento en el que estaba feliz en el Chelsea y cuando llegó la oferta el gran jefe (se supone que Abramovich) me dijo: “Tú no te vas a ningún lado”. Creo que ahí quedaron las cosas claras.

-Jugó varias veces en el Bernabéu, ¿qué le pareció?

-Era la época de los Galácticos, imagínese. Llegamos al Bernabéu con el Marsella y nos pusimos 0-1. Pero luego empezaron a jugar al fútbol y eran insuperables. Nos ganaron 4-2. Después también vine con el Galatasaray, ya en los últimos años.

-¿Comparte la opinión de que no hay grandes nueves actualmente como sí hubo hace unos años? Por ejemplo, no existe un Drogba a día de hoy…

-Mmm… No lo sé, quizá estamos acostumbrados a los que hay. Lewandowski, por ejemplo, es difícil reconocer lo que hace porque estamos acostumbrados a que lo haga. Lo que hace nos parece normal, pero no es normal. Es un gran delantero y mete muchos goles. Por no hablar de delanteros como Cristiano.

-Pero usted pertenece a la generación de Shevchenko, Crespo…

-¡Eso se acabó! Shevchenko es historia, Crespo también, como yo… (risas). Ahora hay otros.

-Morata, por ejemplo. ¿Qué le parece?

-Muy buen delantero, viene marcando últimamente. Cuando has jugado en Real Madrid, Juventus y Chelsea eso significa mucho. No puedes jugar en estos equipos y no ser un gran delantero.

-La Premier se ha convertido en una pelea entre las ideas modernas de Guardiola y las clásicas de Mourinho, ¿lo ve así?

-En el fútbol sólo hay una idea: ganar los partidos. Al final eso es lo importante. Por supuesto que Guardiola quiere jugar bien y que sus equipos, por ejemplo el City ahora, juegan muy bien. Pero al máximo nivel se necesita ganar, conquistar títulos. Quizá ganar como él sea más bonito, pero lo que de verdad lo hace interesante son las victorias. ¿Diferencias entre Guardiola y Mourinho? ¿El estilo de juego? Lo que ambos quieren es ganar y ganar.

-¿Guardiola ha supuesto una revolución en Inglaterra?

-Muchos equipos quieren jugar como lo hace él, o como lo hacía su Barcelona. Ha traído nuevas ideas y nuevas filosofías de cómo jugar. Eso es bueno para el fútbol. Es la evolución del juego.

-¿Ve muchos partidos por televisión? ¿Le gusta?

-Veo bastantes, aunque no me considero un loco. Entiendo el juego, entiendo las cosas que se van produciendo durante los partidos, y casi siempre sé hacia dónde van los encuentros.

-¿Se ve siendo entrenador?

-No lo sé, necesitaría hacer el curso de entrenador primero. Es una posibilidad, porque he jugado para grandes técnicos y de todos ellos aprendí cosas. He visto muchas cosas, muchos estilos, muchas maneras de entender el fútbol. Fue muy interesante para mí, y quizá siga por ese camino.

-Hasta entonces disfrutemos del Drogba embajador.

-Es un honor para mí. Viajar por todo el mundo, sentir lo que el fútbol me ha dado. Me siento un privilegiado por poder vivir todo esto.