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REAL ZARAGOZA

Sangría defensiva

El Real Zaragoza promedia 1,8 goles en contra por partido desde la llegada al banquillo de Lucas Alcaraz y ya encadena once jornadas sin dejar su portería a cero.

Lasure cometió un claro penalti sobre Sangalli en el primer gol del Alcorcón.
PEPE ANDRESDIARIO AS

El Real Zaragoza tiene un grave problema defensivo que se ha ido agravando con el paso de las jornadas. El equipo aragonés ya encadena once partidos de Liga, trece sumando la Copa, sin dejar su portería a cero y promedia 1,8 goles en contra por encuentro desde la llegada al banquillo de Lucas Alcaraz, que aún no ha dado con la tecla para frenar la hemorragia a pesar de cambiar el sistema y pasar a jugar con tres centrales y probar con diferentes jugadores en esa línea.

La última vez que Cristian Álvarez dejó su portería a cero fue el pasado 8 de septiembre, hace más de dos meses y medio, cuando el Zaragoza se impuso al Oviedo por 0-4. A partir de ahí comenzó esa pésima racha de resultados que llevó a los aragoneses a encadenar ocho jornadas sin conocer la victoria, con cambio de entrenador incluido. Todo comenzó con una pérdida de Grippo en campo propio en Almería y desde entonces ni Idiákez ni Alcaraz han sido capaces de poner solución a esta sangría defensiva, que se ha convertido en un grave problema colectivo lleno de errores individuales.

En las últimas jornadas ha habido fallos de todo tipo y de la gran mayoría de jugadores: pérdidas de balón, errores en los marcajes a balón parado, penaltis perfectamente evitables... Fallos que están penalizando enormemente a un equipo falto de confianza y al que cada gol en contra le supone una pesada losa, como es lógico y normal en este tipo de dinámicas.

De hecho, en los cinco últimos partidos, en los que ha encajado nueve goles, el Zaragoza siempre ha visto cómo se ha adelantado el rival. El Elche, el Granada, el Nástic y el Mallorca ya habían tomado ventaja a los veinte minutos, mientras que el Alcorcón tuvo que esperar hasta la segunda parte para asestar su primer golpe al equipo aragonés, que a pesar de estar algo más ordenado tampoco fue capaz de mostrarse como un equipo sólido al que es complicado meterle mano.

El Zaragoza ya ha recibido 20 goles esta temporada, una cifra exacta a la de los dos últimos cursos tras 15 jornadas, y es el sexto equipo que más encaja de la categoría. De esos cinco equipos más goleados, sólo el Oviedo tiene más puntos que los aragoneses, una prueba más de que el primer paso para huir de la zona de descenso es frenar esta sangría.