El único triunfo rayista del curso llegó con un 46,2% de posesión
La pasada temporada no perdió ninguno de los catorce partidos (doce victorias y dos empates) en los que no tuvo la posesión, entre ellos, el duelo en el que selló el ascenso ante el Lugo.
El Rayo se ha forjado una identidad y se basa, entre otras cosas, en tener el balón para ser protagonista e ir al ataque. No obstante, este último Mundial arrojó un dato significativo: la posesión no siempre asegura victorias. De hecho, el conjunto franjirrojo lo ha vivido en sus propias carnes esta temporada.
Su único triunfo fue contra el Huesca (0-1) en un partido en el que tuvo un 46,2% de posesión. Por ahora, el día en que el Rayo tuvo más el esférico fue contra el Getafe, con un 65,8%, aunque perdió por 1-2. Mientras que, cuando menos lo tuvo, fue el del Barça, con un 30,5%. Ahí también terminó cayendo, pero puso al conjunto azulgrana contra las cuerdas y pasó del 2-1 al 3-2 en los tres minutos finales.
Ateniéndonos a las cifras de la pasada campaña, el día en que más posesión tuvo el Rayo fue en el 1-1 firmado ante el Albacete, con un 70,7%. Mientras que en el otro lado estaría el encuentro contra el Valladolid. Sólo un 35,2% de posesión con la máxima efectividad ya que se impuso por 4-1. Es más, la media de toda la temporada ascendería a un 54,22%. Esta 2018-19, la media es del 50,46%.