Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

LEGANÉS

Ezequiel Muñoz se opera de pubalgia: baja hasta enero

El central pasó por quirófano. El lunes volvió a entrenar tras un mes, pero recayó. Pellegrino: "¿Qué si arriesgamos? El alto rendimiento es enemigo de la salud".

Ezequiel Muñoz durante un partido.
FELIPE SEVILLANODIARIO AS

Ezequiel Muñoz, defensa central del Leganés, ha sido operado esta mañana en Barcelona de una pubalgia que venía arrastrando desde principio de temporada. No podrá volver a los terrenos de juego hasta, mínimo, enero, tal y como ha confirmado su entrenador, Mauricio Pellegrino, en sala de prensa. La ausencia de Muñoz pone en más apuros a una zaga con problemas en su eje. Los pepineros solo tienen, a día de hoy, a Omeruo, Tarín y Siovas para el puesto. Mauro dos Santos también está en condiciones de competir, pero el técnico no cuenta con él.

Muñoz lleva sin jugar un partido desde la segunda jornada, cuando fue titular frente a la Real Sociedad. También compitió de inicio en la fecha inaugural, contra el Athletic. Ya en la tercera jornada se ausentó de la lista por molestias en el pubis que no remitieron. El Leganés decidió, tras ver como el dolor no bajaba, que el jugador parase.

Ezequiel ha estado cerca de un mes sin entrenarse con el grupo. El pasado lunes regresó, pero tras una jugada en la que fue al suelo para frenar un disparo de Michael Santos, se resintió y abandonó la sesión con evidentes gestos de frustración. La recaída hizo al club obviar la fórmula conservadora y aceptar el quirófano.

Un "fórmula 1" al límite

Pellegrino ha explicado esta mañana el proceso por el que el central argentino ha tenido que someterse a esta intervención. "Probamos con tres infiltraciones y estuvo tres semanas fuera trabajando. Yo cuando fui jugador viví la misma patología y me fue bien ese tratamiento, me salvé de la operación. En este caso el chico estaba bien para entrar con el equipo, pero las sensaciones que tuvo fueron muy malas”, ha explicado Pellegrino.

El técnico también ha defendido que el lunes Ezequiel entrenara. Dice que no fue precipitado. Pero que la alta competición fuerza a ir al límite y a veces, como en la Fórmula 1, por mucha preparación que haya, el jugador se rompe.

"Los coches de Fórmula 1 se rompen en seguida y tienen cuatrocientos ingenieros detrás. El alto rendimiento es enemigo de la salud. Son chicos que están empujando su límite cada vez más arriba. Nosotros estamos empujando a los jugadores para que den más y el médico los está frenando para que den un poquito menos. Uno necesita los coches bien preparados y cuando están al límite a veces rompen. Es el caso de Ezequiel, que es una pena", zanjó el entrenador