Rubiales y la destitución de Lopetegui: "Toca pasar página"
El presidente de la RFEF abogó por "centrarnos en la era de Luis Enrique, que nos ha devuelto la ilusión". "No tengo sentimientos malos hacia nadie", dijo.
Luis Rubiales, presidente de la Federación Española de Fútbol, está en Cantabria, donde este lunes ha mantenido una reunión con los clubes cántabros de categoría nacional y donde el martes visitará al presidente del Gobierno de Cantabria, Miguel Ángel Revilla. La visita le ha servido también para conocer las nuevas instalaciones de la Federación Cántabra de Fútbol y para hacer unas declaraciones a Radiofútbol, la emisora oficial de la federación que preside José Ángel Peláez, directivo suyo en la RFEF, en las que no ha querido echar sal en la herida del posible despido de Julen Lopetegui: "Yo tengo muchos defectos, pero soy una buena persona. No tengo ningún sentimiento malo hacia nadie, en mi vida y si puedo tener algo, que no es el caso, me dura un segundo. Es más, tengo un filtro que me hace dejar todas las cosas negativas a un lado y centrarme en lo positivo".
El presidente de la Española cree que "lo que toca ahora es pasar página, centrarnos en la era de Luis Enrique, que nos ha devuelto una nueva ilusión a todos. Sabemos que es difícil, Inglaterra nos puso el otro día los pies en la el suelo en el primer tiempo, aunque si entra la bolita en el segundo tiempo podríamos incluso hasta haber ganado. Lo que hemos hecho fue siempre por unos valores que siempre vamos a conservar, que son los valores del deporte".
Algo más beligerante estuvo Rubiales con Javier Tebas, presidente de LaLiga, del que dijo que "hay una discrepancia enorme de filosofía, uno está interesado en el fútbol negocio y otro estamos en que, por supuesto, respetando el negocio haya unos mínimos de respeto a horarios, categorías inferiores, que el retorno económico también para la base y no solo para los que salen en la tele. Es difícil juntarnos en el camino, pero nosotros desde luego que lo vamos a intentar". Además, el presidente federativo le mandó otra carga de profundidad a su némesis: "Cuando sales fuera y hablas con la Asociación de clubes Europeos, con FIFA, con UEFA, incluso con las otras ligas, y ves que hay una persona que no se entiende con nadie..., es que el problema que tenemos en España con este señor lo tiene en toda Europa".
Tampoco dejó pasar la oportunidad de reafirmar su oposición a que se juegue el Girona-Barça en Miami ya que "ni la FIFA, ni la Federación de Estados Unidos, la CONCACAF, la UEFA ya me ha trasmitido su oposición..., no quiere nadie de los que tienen que autorizarlo. Es que además hay una consideración ética, si tú juegas una final en sede neutral, como la Supercopa, lo puedes jugar en donde sea, no perjudicas a nadie. En este caso, un partido que se debe jugar en una sede local de uno de los equipos, no solo se perjudica al Girona, sino a los otros 18 equipos que tendrán que jugar ese mismo partido como visitante y no en sede neutral".
