Samuel Umtiti se 'escapa' de la Ciudad Deportiva
El central francés inicia esta semana una fase muy importante en su recuperación: alternará trabajo de gimnasio con carreras continuas en la Carretera de Les Aigües y La Mola.
Samuel Umtiti prosigue con su lenta recuperación de sus molestias en la rodilla izquierda que le tienen parado desde finales de septiembre. El internacional francés está viviendo con inquietud su rehabilitación, consciente que un paso atrás o una recaída podría significar su paso inevitable por el quirófano para someterse a una artroscopia.
Por ahora la rehabilitación del jugador está marcada por la máxima precaución. Tras tres semanas de trabajo de musculación en gimnasio, la semana pasada empezó a realizar sesiones suaves de campo para probar su rodilla izquierda. Las buenas sensaciones -el jugador sigue asintomático en la zona lesionada- le han abierto las puertas de par en par a la siguiente fase: empezar a correr de forma continua y con diferentes desniveles.
En principio, Umtiti iniciará sus escapadas junto al recuperador Juanjo Brau en la carretera de Les Aigües -un escenario perfecto para empezar a trotar de manera suave- para acabar al final de semana en La Mola -un recorrido mucho más exigente y con desniveles de diferente dificultad-.
Si el defensa supera con éxito esta fase estará ya cerca de regresar al tajo con sus compañeros. En todo caso, en la mejor de las situaciones estaríamos hablando de volver tras el parón de selecciones y con el partido ante el Atlético de Madrid en el Wanda Metropolitano del próximo 24 de noviembre en el horizonte.
Como ya adelantamos en AS, la recuperación está siendo mucho más lenta de lo previsto. El tratamiento conservador para regenerar el cartílago de su rodilla izquierda a base de infiltraciones de plasma saturado de plaquetas y células madre no está siendo del todo exitoso, si bien han empezado a surgir los primeros ‘brotes verdes’ que permiten soñar que podría haber un avance importante en las próximas semanas. En cualquier caso, la amenaza de la espada de Damocles de la operación sigue estando aún en lo más alto.