Pellegrino quiere ponerle freno a un desatado Morales

Tras ganar en el Bernabéu, los granotas, a seguir la racha (18:30, beIN Sports). Paco López y Pellegrino podrían repetir su último once en Liga.

Actualizado a 27 de octubre de 2018 05:09 CEST

ALBERTO IRANZODIARIO AS

No se gana en el Bernabéu todos los días. Ni todos los años. Pero al Leganés, tampoco. Ése el mensaje que impera en el vestuario levantinista desde el mismo domingo por la mañana, casi sin tiempo para saborear una gesta histórica asaltando la casa blanca. Pero es la realidad. Los puntos valen lo mismo (sigue el partido en directo en As.com). Y la mentalidad y las ganas deben serlo directamente proporcional. Si no, error.

Lo mismo plantea Pellegrino en el otro bando. Ganaron al Barça, rascaron en Mestalla. ¿Y qué? Bonito recuerdo para la historia. Pero el presente es hoy. Y Levante y Leganés tienen que pelear por subsistir año tras año entre los grandes para poder seguir firmando páginas de gloria como ésas.

Paco López parece tener claro que ese nuevo dibujo 3-5-2 se queda como sistema referencia. Con un once que en Orriols ya se empieza a repetir casi de memoria, los granotas han encontrado un filón. Y a lo grande. Con tres jugones en el centro del campo. Magia, clase y calidad. Rochina, Bardhi, Campaña. El orden de los factores no altera el producto. Arropaditos atrás con una línea de tres en la que Postigo pone el liderazgo y Cabco y Róber la intensidad y condiciones a partes iguales. Jason y Toño, dos puñales en banda. Igual para adelante que para atrás. Y arriba, un Morales desatado del que se empieza a dudar cuál es su límite. Y aquí viene la incógnita. En el acompañante del Comandante. La pólvora de Roger o todo lo de más de Boateng.

Y en eso anda igual Pellegrino. En busca de ese once reconocido. Quizá sea el de Mestalla. Hoy podría repetirse después de haber dado buen resultado. Pero hace falta una victoria a domicilio. Más de un año llevan los pepineros sin darse una alegría lejos de casa. Ahí incide el técnico en que los suyos deben jugar como si estuvieran en Butarque. Y es seguro que el día que lo consigan serán mejores ellos y los resultados. ¿Será hoy? Veremos...