Verde impide al Espanyol dormir como líder solitario
El Espanyol se adelantó en la primera parte, pero el Real Valladolid no se rindió y en la segunda parte fue mucho mejor y consiguió el empate en el descuento.
El Real Valladolid y el Espanyol empataron en un partido en el que mostraron sus armas para estar en la zona de privilegio de tabla. Los pericos, que son colíderes, aprovecharon en la primera parte, donde los locales no estuvieron cómodos, un error grave en la salida del balón, pero el Valladolid fue superior en la segunda y el italiano Verde hizo justicia de falta en el descuento.
El Espanyol tuvo claro desde el principio que de los fallos en la salida de los pucelanos podía vivir. No se equivocaba. El Valladolid trataba de entrar por las bandas, pero los centros no encontraban rematadores y los disparos lejanos no tenían premio. Los de Rubi permanecían agazapados esperando la ocasión y esta llegó en un mal pase de Moyano al centro a Míchel en el centro del campo, Melendo recuperó y el balón le cayó a Borja Iglesias que desde la frontal mandó el balón a la escuadra. El gallego tiene un idilio con el gol cuando juega contra los blanquivioletas. En tres partidos les ha hecho seis goles. El golpe dejó ‘sonao´ varios minutos a los locales que volvieron a fallar en la salida y casi les costó el tanto de Didac o Darder, aunque el que estuvo más cerca de marcar fue Hernán Pérez que en su vuelta a Zorrilla cabeceó a la escuadra e hizo lucirse al portero vallisoletano, Masip. Reaccionaron los locales, sobre todo, con las intervenciones de Toni, que hizo parar a Diego López, pero al descanso los pericos saboreaban el primer puesto.
La segunda parte fue de los pucelanos. El Espanyol de Rubi entendió que tenía que guardar el resultado, el liderato, y dio muchos pasos atrás. También el Valladolid creció y no arriesgó pases en las zonas de peligro e insistió en la banda izquierda donde Toni y Nacho le hicieron pasar un infierno a Javi López. Por ahí llegaron las ocasiones más claras, como el taconazo de Plano que se estrelló en un defensor y Diego López. También Alcaraz se plantó solo ante el portero españolista, pero su tiro se fue arriba inexplicablemente. Apretaba el Valladolid, pero ni Míchel, ni Toni acertaban hasta que el italiano Verde de falta, desde 30 metros, marcó un golazo tremendo que hizo justicia a lo visto en el encuentro.
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Rubi: "Los jugadores estaban enfadados"
El técnico del Espanyol, Joan Francesc Ferrer "Rubi", reconoció como "justo" el resultado obtenido hoy en el estadio José Zorrilla ya que, en su opinión, "el Real Valladolid supo presionar muy bien y toda la segunda mitad jugaron en nuestro campo".
"No sacamos contraataques y, aunque ellos tenían empuje, no había ocasiones en contra, pero no fuimos capaces de superar la presión del rival y, si no haces pases, y no ganas las disputas, llamas al mal tiempo", comentó el técnico catalán.
Según indicó en la rueda de prensa posterior al encuentro, el Espanyol "solo fue un buen equipo durante la primera mitad", ya que en la segunda, el Real Valladolid les "encerró" en su área y no tuvieron opciones para armar contraataques, sino que se limitaron a defender.
Rubi admitió que los jugadores "estaban enfadados" tras el choque, "porque han perdido dos puntos" y, con ellos, la posibilidad de haberse acostado como líderes de la clasificación, pero, sobre todo, "porque saben que no han hecho una buena segunda parte y han quedado a merced del rival".
Con la entrada de Duarte por Sergio García, Rubi buscó una vía para enlazar más balones en el centro del campo, ya que se cometían muchas pérdidas, pero el objetivo no era replegarse y dejar de mostrar ambición en ataque, aunque la presión del Real Valladolid les obligó a centrarse más en defensa.
Rubí dejó claro que "cada partido es una historia" y, en este caso, el hecho de haber podido ser líderes de Primera ha supuesto "una gran experiencia", aunque valoró poder acostarse como "colíderes", empatados a puntos con el Barcelona.
"Hay que ser críticos, porque es cierto que en la segunda parte perdíamos con mucha facilidad el balón, pero el equipo hizo una primera mitad muy buena y, además, no hay que quitar mérito al Real Valladolid, que ha jugado una gran segunda mitad y, con su presión, ha impedido que pudiéramos acercarnos a su área", concluyó Rubi.-EFE
Sergio González: "Hubiera sido injusto no empatar"
El entrenador del Real Valladolid, Sergio González, sacó pecho ante el juego de su equipo en la segunda mitad del partido ante el Espanyol, en la que los jugadores entendieron que "había tiempo para corregir la situación y, por tanto, no había que precipitarse, sino buscar los espacios con inteligencia".
Según el técnico catalán, su equipo salió "muy metido y sabiendo el rival que tenían enfrente" pero "una acción aislada les dio el gol" y les "sacó" del partido, porque querían "solventarlo pronto", lo que hizo que cometieran "errores en los pases" y que "perdieran la concentración".
González dejó claro que si el Real Valladolid perdía "lo haría con sus ideas", y por ello salieron con la máxima intensidad tras la reanudación, logrando "tener al Espanyol" en "terreno blanquivioleta", lo cual supone un mérito, ya que el rival de hoy era "un equipazo".
"Hubiera sido muy injusto no lograr el empate, aunque el Espanyol ha demostrado su calidad y se merece el coliderato", matizó el entrenador del Real Valladolid, quien reconoció que, en el descanso, les pidió a sus jugadores "tranquilidad" porque estaban "alimentando" lo que el rival quería.
Aunque admitió que, a su equipo "le faltó ese último remate" en muchas ocasiones, como el de Alcaraz, en el minuto 57, que falló un claro disparo dentro del área, "al final se hizo justicia" con un "golazo" de Verde "que solo él puede explicar cómo lo ha conseguido".
El punto obtenido ante el Espanyol supone "reforzar la idea de que se sigue el camino adecuado" y que "cuando el equipo hace lo que tiene que hacer, logra la recompensa", porque "la segunda mitad fue un monólogo, y ante un rival potentísimo, que buscó perder tiempo al ver peligrar su ventaja".
Ahora, su objetivo es "disfrutar del momento", preparar el partido de Copa del Rey, que el miércoles les llevará a jugar ante Mallorca y, luego, pensar en el siguiente rival liguero, que será el Real Madrid, al que visitarán en el Bernabéu.
No quiso dejar la sala de prensa del José Zorrilla sin destacar que "la comunión entre el equipo y el público fue perfecta, porque se retroalimentaron ambos" y, en este sentido, se mostró "agradecido" por haber contado con su apoyo hasta el final y por "haber creado un ambiente extraordinario". -EFE
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