El Real Madrid ya sabe cómo sobrevivir al Clásico sin Cristiano
En su etapa con el Madrid, participó en 30 Clásicos: ganó ocho, empató ocho y perdió 14. Sólo dejó de jugar dos... y ambos acabaron en triunfo blanco.
El Madrid jugará su primer Clásico sin que esté Cristiano en su plantilla desde mayo de 2009, cuando el Barcelona humilló a los blancos con aquel 2-6 en el Bernabéu. Desde entonces, 32 Clásicos han tenido lugar: 18 de Liga, dos de Champions, seis de Copa del Rey y seis de Supercopa de España. Y Cristiano estuvo presente en 30, el 94%. Sólo se perdió dos, ambos decisivos para la consecución de un título. Y al Madrid no le fue nada mal sin él, todo lo contrario: ganó ambos. Un motivo para la ilusión del madridismo de cara a este Clásico del domingo.
El primero fue la final de la Copa del Rey 2014, celebrada en Valencia. Cristiano, lesionado, tuvo que verlo desde la grada. El Madrid arrancó mucho mejor y se puso por delante gracias a un gol de Di María, que formó tripleta de ataque (por entonces solía jugar en la medular cuando la bbC le cerraba el paso) con Benzema y Bale. Los de Ancelotti fueron mucho mejores durante la mayor parte del choque y debieron ampliar la ventaja, pero no lo hicieron y Bartra, de cabeza tras un córner, igualó el partido. Con el partido encaminado para la prórroga, Bale se sacó aquella jugada por la izquierda, en la que fundió a Bartra en una carrera que llegó a discurrir más allá de la línea del campo, para marcar el 1-2 final. Neymar chutó al poste en la última jugada del partido y Cristiano, desde la grada, celebró el título blanco que precedió a la Décima. Luego, sobre el césped, su afectuoso saludo con Messi fue la imagen de la normalidad tras los años de tensión de la era Mourinho.
El siguiente partido fue el curso pasado, uno de los últimos Clásicos antes de la marcha del portugués a la Juventus. En la ida de la Supercopa de España, Cristiano salió desde el banquillo para hacer de todo, literalmente: marcó un golazo, vio la amarilla al celebrarlo quitándose la camiseta y luego la segunda por, supuestamente, simular un penalti (no fue el caso, De Burgos Bengoetxea se equivocó). En su confusión, dio un empujón al árbitro que le costó una sanción de cinco partidos: uno por la expulsión y cuatro por la agresión. De ahí que no jugase la vuelta, a la que el Madrid llegó con un cómodo 1-3 de la ida. No echaron en ningún caso de menos los de Zidane a Cristiano: triunfo por 2-0 (golazo de Asensio y tanto de Benzema) y título para las vitrinas blancas.
Dos Clásicos sin Cristiano, dos victorias, 100% de efectividad, cuatro goles a favor y sólo uno en contra. Es sólo un dato frío y sin relación, pues Cristiano convirtió al Barcelona en una de sus víctimas favoritas: le hizo 18 goles. Pero sí es cierto que con Cristiano el Madrid tiene un dato mucho menos brillante ante su eterno rival: 30 partidos, ocho victorias, ocho empates y 14 derrotas, casi el 50%.
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