Pita eleva al Lugo y sentencia a Gordillo

Los locales celebraron su partido 300 en Segunda con una victoria. El Nástic se queda como colista.

Actualizado a 21 de octubre de 2018 18:13 CEST

Imagen del Nástic-Lugo. Pedro AgreloDIARIO AS

Cuando el fútbol transita por los caminos de lo plúmbeo siempre es la calidad la que desequilibra la balanza. Pasó esta jornada en el Anxo Carro, en un duelo entre dos equipos con urgencias que decidió Pita con un gol y un clinic de lo que debe ser un mediocentro. A sus 34 años es el pichichi de su equipo, el faro que guía su juego y la letanía que los aficionados invocan cuando las cosas vienen mal dadas. Justo lo que le faltó a un Nástic que desgranó en el Anxo Carro el porqué de su situación. Ni fútbol, ni táctica ni alma en los granas salvó el obligado arreón final.

El dominio recayó desde el inicio en los pies del Lugo, aunque no se debe confundir posesión, que la tenía, con ocasiones. Dicho dominio venía dado por la pobre capacidad del Nástic para sacar el balón con criterio, escogiendo casi siempre el balón largo de Albentosa o las bajadas de Uche a la media para intentar distribuir. Aún así, los granas encontraban espacios tras las espalda de Seoane, pero sin producción. El Lugo, mientras, jugaba a abrir el balón a banda y centrar al área, pero con Dongou de delantero los remates no llegaban. Todo lo contrario ocurría con Manu del Moral, que tuvo la más clara del Nástic en un remate a bocajarro que desvió Juan Carlos. Pero cuando el partido es tan malo lo desequilibra la calidad, y de esa a Pita le sobra. El coruñés recogió un balón suelto en la frontal y, como suele, la puso lejos de las manos de Becerra. El Lugo se llevaba un excesivo premio al descanso.

En el descanso Javi López optó por dejar a Sergio Gil en el banco y meter en su lugar a Aburjania, un cambio que mandaba un mesaje claro: menos posesión y más cemento.Gordillo, a la desesperada, juntaba en el campo a Uche, Del Moral y Barreiro, pero el problema del Nástic no era sumar atacantes, sino la ausencia de un patrón de juego. Iriome pudo sentenciar con un trallazo al palo, con unos rojiblancos aprovechando los espacios para correr, muy cómodos. Lopez Toca no vió un penalti claro a Campillo y volvió a perdonar el Lugo la sentencia por medio de Escriche. El Nástic aún hizo un último intento, pero nunca estuvo cerca del empate. La victoria lleva la tranquilidad a la casa rojiblanca y deja al Nástic colista y a Carrillo sentenciado.

Jose Antonio Gordillo:

"Estoy tranquilo por el trabajo que han hecho los jugadores pero muy triste por el resultado y la situación. Yo no puedo entrar en temas de planificación, nosotros hemos trabajado muchísimo, con mucha dedicación y son otros los que tienen que tomar las decisiones. Hoy hemos intentado meter veteranía pero nos ha faltado fuerza al final. Llevamos toda la semana hablando de ultimátum pero yo he trabajado igual".

Javi López:

"Debimos llegar al tramo final con un marcador más holgado y al final hemos sufrido con balones colgados. De Pita no hay mucho que decir, todos sabemos lo que es para este club. Sergio Gil ha tenido carga de minutos en los últimos partidos por eso lo he sustituido, pensando en mantener la intensidad, aunque estaba haciendo un gran trabajo. Nos gusta tener la pelota pero cuando tenemos la opción de correr como en la segunda parte también tenemos equipo para ello".