Marcelino toma el partido contra el Celta como punto de inflexión
El Valencia acabó con buenas sensaciones pese al empate y los datos avalan la teoría de que fue el mejor partido de toda la temporada.
"Si seguimos en esta línea, los triunfos llegarán pronto”. La sentencia es de Rubén Uría, segundo entrenador del Valencia. La pronunció en todas y cada una de las televisiones con derechos que le entrevistaron tras el partido y en la rueda de prensa. Es una creencia y un mensaje: aún no se ha ganado pero la forma de comenzar a encadenar victorias se acerca mucho a lo que el equipo hizo contra el Celta, el pasado miércoles.
El juego, la manera de encarar el partido, el buen nivel que mostraron los pesos pesados, la recuperación de hombres clave en el sistema... todo invita al optimismo. Y no son solo las sensaciones las que invitan al cuerpo técnico a pensar que el partido del Celta es el punto de partido para comenzar a sumar de tres en tres y escalar posiciones en la tabla.
Los datos también avalan esta teoría. Contrastando variables, fue el partido más equilibrado del equipo esta temporada, en ataque y en defensa. Fue el partido que menos balones perdió el equipo (107) de los seis jugados hasta el momento. Lejos queda el segundo mejor (120, ante el Betis). Y además fue el tercero que más recuperó (60). 61 recuperó ante el Levante y 69, ante el Espanyol. Pero esos días la se multiplicó la cantidad de balones perdidos.
Además, en ataque remató 13 veces a portería, sólo por debajo del día del Levante (14). Y sólo le remataron 3 veces entre los tres palos (7 en total). Sólo el Villarreal le tiró menos a Neto (una vez, entre los tres palos). Además, el balón estuvo el 26,3 por ciento del tiempo en zona de dos tercios de ataque del Valencia