El Camp Nou cumple 61 años en una cuenta atrás para su remodelación
El proyecto ha sufrido retrasos, pero la reforma ya es imparable. En primavera, el Miniestadi será sustituido por el Estadi Johan Cruyff tras 36 años de servicio.
El 24 de septiembre de 1957 se inauguraba el Camp Nou que, por tanto, cumple hoy 61 años de servicio al Barcelona en una cuenta atrás ya imparable para una faraónica remodelación que afectará a todo el entorno del estadio en el proyecto denominado Espai Barça que supone un coste global de 600 millones de euros.
Este gran proyecto no únicamente afecta al estadio, que pasará a ser cubierto y se modernizará en todos sus servicios de la restauración a los aparcamientos sino que además afectará al Miniestadi, que será demolido y sustituido por el Estadi Johan Cruyff en Sant Joan Despí mientras que en en lugar que ocupa se construirá un nuevo Palau.
El proyecto incluye también la reurbanización urbanística de la zona, con la construcción de hoteles y oficinas además de un edificio corporativo de la entidad.
En el caso de cumplirse el último calendario, el nuevo estadio debería estar concluido en agosto del año 2022, mientras que la totalidad del proyecto (oficinas, hoteles etc…) no se completaría hasta noviembre del 2024. Para poder pagar una obra de tal magnitud, el estadio pasará a tener apellido. Una marca esponsorizará al Camp Nou y, en principio, en breve debería darse a conocer los detalles.
El proyecto ha sufrido retrasos respecto al plan que aprobaron los socios el 5 de abril de 2014 en referéndum con el 72,3% de los votos favorables. En el plan que se votó, las obras tenían que empezar en junio del 2017, pero no se iniciarán hasta el mismo mes del 2019. Este verano se empezaron a hacer en el campo trabajos secundarios de acondicionamiento de acceso para los camiones y las grúas, así como de tendido eléctrico para que el próximo se empiece a trabajar en serio.
Las obras estuvieron paradas a causa de un problema de permisos con el ayuntamiento que se solventó finalmente el 12 de abril de este año cuando el Ayuntamiento y el club firmaron el Plan Urbanístico de la zona que reducía en 2.000 metros cuadrados los metros de techo destinados a oficinas y hoteles respecto al plan inicial.
Pero la primera gran obra que podrá verse acabada no será en el entorno del Camp Nou, aunque forme parte del Espai Barça: será la inauguración del nuevo Miniestadi, que pasará a llamarse Estadi Johan Cruyff y que se encuentra ya muy avanzado en su construcción. Está situado en Sant Joan Despí, al lado de la Ciutat Esportiva del club, y tiene previsto inaugurarse en febrero de 2019 tras una inversión de 12 millones de euros. Allí jugará el filial blaugrana, el equipo femenino y los juveniles en la Youth League. Contará con un aforo para 6.000 personas.
Por tanto, esta será la última temporada de servicio del Miniestadi, que el pasado domingo cumplió 36 de funcionamiento.