Si el fútbol fuese sólo dinero, la diferencia de 123 millones de euros entre los límites salariales de Sevilla (162,7) y Getafe (39,2), desvelados por LaLiga esta semana, convertiría en un trámite de final cantado el partido de esta noche en Nervión(sigue el encuentro en directo en As.com). Afortunadamente, fútbol es fútbol y el Getafe no es un club acaudalado, pero sí orgulloso y áspero. Y con un buen plan que no sólo está basado, como quiere ver algún reduccionista, en cortar el juego del contrario. Bordalásha hecho algo más de este Getafe que llega al Sánchez Pizjuán con un portero conocido para el sevillismo de a pie. A David Soria, como a Sergio Rico, se lo llevaron por delante las dudas sobre la portería y el runrún de Nervión.
Soria jugó su último partido con el Sevilla hace apenas cuatro meses, pero sus enemigos de hoy le serán desconocidos. André Silva ha emergido como nueva esperanza del sevillismo. Además de su primera gran tarde en Vallecas, viene de hacer un gol excelente con Portugal. Hay que vigilar su continuidad. Como la de Promes, un extremo diestro que suele jugar de falso extremo izquierdo pero que se mueve por todo el frente de ataque y que tiene desequilibrio y golpeo. Promes suma 30 internacionalidades y, con 26 años, debería estar en perfecto estado de cocción.
En el Getafe, que no puede contar con Markel Bergara ni con Arambarri pero sí con Maksimovic, no hay secretos. Ni un metro libre en el campo, agresividad con Djené, oficio en los laterales con Damián y Antunes, temple con Portillo, velocidad con Amath y juego directo para Jaime Mata y Ángel. Pero si el Sevilla no quiere perder rápido la estela que le lleve de nuevo a la Champions, perdonar en casa está prohibido.