1x1 Barcelona: Un estelar Ter Stegen mantiene el liderato
El meta alemán salvó al equipo de una auténtica debacle con dos intervenciones estratosféricas cuando el luminoso marcaba 1-0 a favor de la Real Sociedad.
Ter Stegen: El portero alemán se ganó el cielo frustrando sendos uno contra uno del rival cuando el equipo perdía 1-0. Está claro que las paradas del guardameta fueron la espoleta que sirvieron para que el equipo acabara reaccionando y levantando el resultado adverso.
Semedo: Partido simplemente lamentable del lateral portugués, que no dio una a derechas ni en defensa ni en ataque. Uno está empezando que este jugador ha perdido la confianza. Para hacérselo mirar su partido de esta tarde. Es ya la segunda vez que no sale tras el descanso. Las oportunidades se le empiezan a escapar alarmantemente.
Piqué: El mejor en defensa, siendo además decisivo en la jugada del primer gol del Barcelona, tras una asistencia oportuna de cabeza. Tuvo algún despiste en alguna cesión al guardameta, pero su partido fue espectacular. El único que fue capaz de rematar a puerta en la primera parte.
Umtiti: El gol de Elustondo se lo comió literalmente con patatas al dejarse superar demasiado fácil en el salto a por el balón. Un partido sin mucho que destacar del francés.
Alba: En esta ocasión no estuvo tan dinámico en sus acciones por la banda. Apenas pudo conectar con su socio, Leo Messi, y eso acabó pasando factura en su juego. Acabó con rampas.
Sergi Roberto: Bastante mal en la primera parte jugando como interior derecho, aunque la culpa de su mala actuación fue más de Semedo, que en ningún momento se desdobló con criterio, ofreciendo pocas opciones de salida de balón. En la segunda parte retrasó su posición hasta el lateral, pero tampoco se le vio muy acertado, teniendo muchos problemas para contener los ataques donostiarras.
Rakitic: El croata no estuvo muy fino, cometiendo extraños errores no forzados en el mediocampo que le pudo costar muy caro al equipo. Pese a su enorme polivalencia, es evidente que el pivote defensivo se le escapa entre sus posibilidades. Mejoró un poco más como interior en la segunda parte, pero su partido fue muy discreto.
Rafinha: Si tenía alguna intención de reivindicarse el brasileño ha perdido de forma lamentable la ocasión. No se puede decir que haya hecho un mal partido, pero ni mucho menos bueno. La mejor definición es intrascendente y eso en un jugador que quiere ganar minutos es veneno puro. Fue sustituido por Sergio Busquets.
Messi: En la primera parte apenas apareció por culpa del férreo marcaje del rival y por la poca eficacia en el pase de sus compañeros. Tras el descanso y la aparición de jugadores como Coutinho y Busquets todo fue mucho más fácil para el crack argentino que volvió a regalar un recital de asistencias y regates en una baldosa.
Suárez: El charrúa sigue en racha: se fue a su selección tras marcar dos goles y ha vuelto para marcar uno importante en el momento que más lo necesitaba el equipo. Su capacidad de sacrificio y lucha es siempre contagiosa. Eso sí debería moderarse un poquito en sus protestas porque ahora con el VAR el margen de error es mínimo.
Dembélé: Sigue activado de cara a gol, marcando ya su cuarto gol en cinco partidos. Los mismos que marcó en Liga la temporada pasada. Pero sigue teniendo muchas lagunas en su juego y a veces es demasiado irregular. Perdió infinidad de balones en la primera parte.
CAMBIOS:
Coutinho: Su presencia en el campo fue un auténtico revulsivo. Valverde lo alineó tras el descanso por un nefasto Semedo y el equipo cambió de cara de forma radical. Empezó a combinar y jugar a fútbol con criterio. El brasileño es demasiado bueno para tenerlo en el banquillo. Estuvo cerca de marcar uno de sus típicos goles fuera del área pero en esta ocasión Rulli le leyó bien la jugada.
Sergio Busquets: Simplemente vital. Su aparición en el campo fue lo más parecido a una aparición mariana en Lourdes. El mediocampo se iluminó y el partido solo tuvo un color: el blaugrana. Impresionante su forma de entender el juego y de mover el equipo. Rafinha lo pudo ver desde el banquillo. Que tome nota.
Arturo Vidal: Es el cambio que nos tiene habituado Valverde en los quince últimos minutos. Nada nuevo bajo el sol, pero en todo caso habría que preguntarse sobre si es efectivo porque en Zorrilla y en el Nuevo Anoeta el equipo acabó pidiendo la hora.
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