Vender futbolistas es el único camino para crecer
El Athletic y la Real han aumentado el límite salarial gracias a unas ventas superiores a los 60 millones, mientras que el Espanyol lo asume para otros veranos.
El dato es llamativo: el Espanyol es el único club de LaLiga que ha visto reducido su límite salarial, que ha pasado de 60,9 a 56,7 millones. El equipo quedó la temporada anterior tres puestos por debajo (11º) que la primera de Quique Sánchez Flores (8º) y Cornellà-El Prat fue el estadio menos ocupado (49,70%) de los conjuntos que se han mantenido en Primera. Pero estos datos no son tan determinantes para configurar el límite salarial como otros.
Para ejemplificar este hecho pongamos dos ejemplos. El Athletic Club quedó el curso pasado 16º y el año anterior 7º, mientras que su límite ha aumentado en 19 millones. La Real Sociedad también perdió seis posiciones y la ocupación de su estadio es de un 66,80%, también inferior a hace un año, pero su límite ha aumentado en 16 millones. El Espanyol ha pasado de estar muy cerca de estos clubes, incluido el Betis, a situarse a 24 millones del noveno y a encuadrarse en otro rango de equipos de menos historia, como Celta, Leganés o Levante. ¿Dónde radica la ecuación que no cumple el Espanyol?
El Athletic ha vendido a Kepa Arrizabalaga por 80 millones y a Laporte por 65 (145) y la Real Sociedad a Odriozola por 30 e Iñigo Martínez por 32, lo que supone 62 millones de ingresos. El club blanquiazul ha veniddo a Gerard, Navarro y Aarón, pero este curso solamente ha ingreso por ellos 17 millones. El propio Leganés ha vendido a Diego Rico ya por una cifra similar. En esos guarismos está la clave. “No hacemos públicos los datos económicos individuales de los clubes”, comentan desde LaLiga, que no quieren dar detalles de los últimos veranos del Espanyol.
La única manera de que el club perico aumente su límite salarial en el futuro es la de aumentar los ingresos. Por los canales ordinarios, el club ha sido incapaz estos años de dar un salto de calidad, con reducciones de ingresos en los abonos o sin cubrir partidas importantes como el naming right, pese a que se han conseguido algunas mejoras en patrocinadores. El freno a la inversión extraordinaria de Rastar Group también ha sido otro inconveniente. Al Espanyol solo le queda dos caminos: o hacer como el Betis y clasificarse para Europa o, por el contrario, vender a sus mejores jugadores para ampliar el límite salarial y poder pagar a otros refuerzos que aumenten el nivel de la plantilla. Una idea que asumen en el club y en la dirección deportiva con vistas al trabajo del próximo verano.
La reordenación pasa por estas ventas, un ingreso que además ayudará a pagar la deuda que se le debe al presidente, otro de los caballos de batalla del futuro. Una de las buenas noticias que transmiten desde el club es que alrededor de nueve millones de euros quedarán liberados la próxima temporada, que corresponden a jugadores que acaban contrato o a pagar la parte proporcional del acuerdo del cuerpo técnico y de Quique.
La historia del Espanyol continúa siendo circular, y de nuevo el crecimiento de la entidad depende de la venta de futbolistas. En este caso, ser duros e inflexibles en las negociaciones y sacar dinero tiene un doble efecto: aumentar los ingresos y que LaLiga al mismo tiempo de más margen el límite salarial. La situación del Espanyol ha ido en sentido contrario a LaLiga. Se espera revertir. Pero el peaje es caro.
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