Jackson Martínez ruega otra oportunidad
El delantero colombiano lleva sin ficha desde febrero y en los últimos días busca con urgencia un club. Le han cerrado las puertas en México y Portugal.
Jackson Martínez fue uno de los jugadores de moda en 2015 y eso le llevó hasta el Atlético de Madrid por 36 millones de euros. Fue presentado como uno de las apuestas más fuertes del club rojiblanco en los últimos años, pero nunca llegó a engranar en los esquemas del Cholo Simeone y un año después optó por sumarse a la moda del mercado chino arrastrado por un contrato blindado en oro.
El delantero de Quibdó (un municipio en la zona del Pacífico de Colombia) se aseguró un sueldo de más de 12 millones de euros al año en el país asiático, pero rápidamente se dio cuenta de que deportivamente había perdido la apuesta. En los dos años en el Guangzhou Evergrande sólo disputó 16 partidos y dejó 4 goles en la memoria de sus aficionados. Una cifras que tampoco se desvían mucho de las que dejó en el Vicente Calderón (22 partidos y 3 goles). Unos números muy alejados de los que le catapultaron a la élite europea con el Oporto (92 goles en 136 partidos)
Su triste paso por China finalizó en febrero de este año y de malas maneras. De la noche a la mañana el Guangzhou decidió dejarle sin ficha y le borró de manera inmediata de su web.
Ese día comenzó el reseteo del internacional colombiano, que lucha por todos los medios por una nueva oportunidad. A sus 31 años busca un club donde pueda resurgir y devolver la confianza en forma de goles, pero no está siendo fácil.
Prisas por conseguir una nueva oportunidad
En los últimos días sus agentes corren en busca de una última etapa y la semana comenzó con un ofrecimiento al León mexicano. Se llegó a dar por cerrada su llegada, pero el director deportivo, Rodrigo Fernández, le cortó las alas. "No, no. Se habló. El presidente ya dijo que no hay nada, por el momento el equipo está bien".
La última opción ha sido tocar al Sporting de Portugal. El club lisboeta vive uno de los momentos más convulsos de sus últimos años tras la salida del presidente y una invasión del campo de entrenamiento que terminó con algunos futbolistas pidiendo la salida del club y los agentes del delantero han llamado a esa puerta en las últimas horas, pero los leones de Portugal también le han descartado como sustituto de Bas Dost.
El tiempo corre en su contra para incorporarse a un club antes de que finalice el mercado de traspasos en algunas de las grandes ligas europeas, pero a su favor cuenta no tener ficha y poder firmar un nuevo contrato en cualquier momento, pero tardaría más tiempo en coger la forma física y poder competir por un puesto con sus compañeros.