Marcos Llorente no convence
Lopetegui le pidió que se quedase, pero no ha dado el salto esperado y ante el Getafe fue el descarte… Villarreal, Espanyol y Alavés, pendientes de su posible salida.
Marcos Llorente sigue sin encontrar su sitio en el Real Madrid porque con Lopetegui el panorama no ha cambiado. Si con Zidane fue el cuarto futbolista del primer equipo menos utilizado (1.063 minutos), el técnico vasco no muestra tampoco fe en él. Con Casemiro lesionado en Tallin, Lopetegui optó por meter a Ceballos. Ante el Getafe, la situación fue a la inversa. Titular Ceballos y el cambio, Casemiro. Ni rastro de Marcos Llorente…
El club mira preocupado su rendimiento desde que se encumbró como canterano con capacidad de ser protagonista durante su cesión en el Alavés. El año pasado era patente su falta de feeling con Zidane, algo que ya se arrastraba de su etapa juntos en el Castilla, pero Lopetegui le prometió al llegar hacer tabla rasa y no parece que la cosa funcione. "Mi idea era seguir, no dependía del entrenador", dijo el mediocentro en la gira por Estados Unidos. Pero salvo el primer partido de la gira, ante el United y con los mundialistas aún muy justos de forma, a Marcos Llorente apenas se le ha visto. Contra el Getafe incluso fue el descarte de Lopetegui. El nuevo técnico quiere implementar un sistema en el que es más importante la presión alta (de ahí que le guste Ceballos) que contener con un pivote puro. Kovacic, capaz de jugar de seis y de ocho, le valía para ambas funciones pero ya no está y Llorente tampoco ha dado el salto que la entidad esperaba.
Una conjunción de factores que vuelve a ponerle en el mercado. Lopetegui pidió al club que no escuchase ofertas por él, pero la situación ahora es más tibia. Pretendientes sigue habiendo y queda algo más de una semana de ventana de fichajes. El Villarreal, como el Espanyol, ha preguntado por él, pero el escollo es su salario. También para el Alavés, que ha aparcado la intentona hasta enero. El Madrid no le dejará salir, de momento, porque no quiere adelgazar aún más la nómina de centrocampistas tras la salida de Kovacic.
