Eusebio y Onésimo, dos 'paisanos' de Valladolid
El primer y segundo técnico del Girona 'debutan' ante su pasado. Onésimo fue jugador y técnico de los pucelanos. Eusebio es socio de la Bodega Cuatro Rayas, patrocinador vallisoletano.
El encuentro de mañana entre el Girona y el Valladolid será de estrenos y reencuentros. Será el primer partido oficial de LaLiga 2018-19 y, además, el conjunto pucelano regresa a Primera. Pero no todo queda allí porque Eusebio debutará en el banquillo rojiblanco y lo hará ante uno de sus exequipos. Y también lo hará Onésimo, su segundo. Ambos vivieron grandes momentos como futbolistas en el Valladolid e incluso el actual segundo técnico del Girona dirigió al primer equipo del Valladolid en 2010. Fue efímero porque solo duró diez partidos (únicamente sumó seis puntos de 30 posibles), pero está en su currículum.
El que pudo dejar más huella en el Valladolid fue Onésimo. Aquel jugador que hizo vibrar a los aficionados al fútbol con regates endemoniados y acciones inverosímiles le debe mucho al equipo pucelano. Tras impresionar en sus categorías inferiores, debutó con 18 años en Primera con el primer equipo de la mano de Xabier Azkargorta en un partido contra el Sevilla, que precisamente decantó Eusebio Sacristán con su gol. Tras años dejando destellos firmó por el Barcelona (coincidió con el presidente gerundense Delfí Geli) y alternó el filial con el primer equipo azulgrana de Johan Cruyff. Eso sí, solo disputó cinco encuentros: dos de Liga, dos de la Supercopa de Europa contra el Milán y uno memorable contra el Anderlecht de la Recopa. Tras abandonar el Camp Nou regresó al Valladolid y tres temporadas después se fue el Rayo Vallecano para seguir ampliando su figura. Eso sí, aún le quedaría fútbol por demostrar y después pasó por Sevilla, regresó a Vallecas, Burgos y Palencia antes de retirarse en 2002 con más de 200 partidos en Primera en sus botas. Tras ello, pasó del césped a los banquillos y, además, de Huesca y Toledo, hizo carrera en casa. Estuvo en el Valladolid B y el 1 de febrero de 2010 le necesitó el primer equipo. Relevó a José Luis Mendilibar. Ahora es el segundo de un Eusebio Sacristán que también vivirá mañana un partido especial y repleto de recuerdos.
Su trayectoria como futbolista la inició en 1983 en el Valladolid. Fue, sin duda uno de los mejores jugadores que salieron del club vallisoletano y en su primera campaña llegó el único título del equipo pucelano con la Copa de la Liga. Aunque la gloria le llegó con el Barcelona. Formó parte del 'Dream Team' y ganó cuatro Ligas, una Copa del Rey, tres Supercopas de España, una Recopa de Europa, una Supercopa de Europa, y la Liga de Campeones en 1992. Tras ser azulgrana jugó dos temporadas en el Celta y cerró su círculo como futbolista en el Valladolid. Mañana estará delante de uno de los equipos de su vida. Y hay algo que aún le une al Valladolid: es socio de la Bodega Cuatro Rayas, primer patrocinador del club vallisoletano.
Otro bando. En el Valladolid también hay jugadores que tienen pasado en el Girona. Se trata de Kiko Olivas, que vivió el ascenso a Primera el curso pasado como pucelano, y Rubén Alcaraz. El mediocentro firmó por el Valladolid hace escasas semanas y no hay cláusula del miedo. Jugará mañana en Montilivi.