Golazo de Parejo y laguna defensiva del Valencia
El equipo de Marcelino empezó perdiendo en el King Power, pero reaccionó con un gran Piccini. Buenos destellos y alguna sombra en la cuarta prueba del verano.
El Valencia dejó buenos destellos y alguna sombra en su cuarta prueba del verano. En un escenario con aroma a Champions dio muestras de que algunos movimientos ya están mecanizados pero también el Leicester sacó a relucir algunas lagunas. Unas a solucionar con trabajo (las defensivas) y otras que irán mejorando con el paso de los días (el aspecto físico).
En el plano positivo, destacó Piccini. El Valencia va a mejorar con su fichaje seguro. Zancada y desborde a campo abierto son sus mejores características. Se le vio en el gol de Parejo (gran jugada colectiva) y en alguna que otra arrancada que llamó la atención del sobrio y entendido público de Leicester (al menos el que asistió al Power Stadium para este amistoso).
Evidentemente el Valencia tiene cosas que mejorar, a 20 días del inicio liguero. Principalmente la forma de alguno de sus jugadores franquicia. La carga de trabajo de las primeras semanas de la pretemporada se nota y a hombres como Kondogbia o Rodrigo (que llegó tarde por el Mundial) se les ve todavía algo agarrotados y con falta de chispa. Nada que no se pueda solucionar en estos días que faltan para arrancar LaLiga.
Pronto llegó el primer gol del Leicester. Diabaté caracoleó por la izquierda, Maddison la peleó con Vezo y creó un caos en la defensa tal que provocó un hecho insólito: que Kondogbia entrara blandito a un balón. El rechazo le llegó a Iheanacho que fusiló a Jaume.
El gol se gestó en la banda de Piccini. Y el italiano quiso resarcirse pronto. Enseguida se fue al ataque, desdoblando a Ferran. Ganó línea de fondo y encontró a un compatriota. Y Zaza hizo lo que mejor sabe hacer: controló de espaldas y le puso un caramelo a Parejo. El de Coslada se relamió… y la coló en la jaula de Schmeichel.
En la segunda parte, llegó el carrusel de cambios, lo que deslució el duelo. Marcelino dio minutos a los que más lo necesitaban, como Kondogbia y Ferran, que disputó los 90 minutos. Neto dejó su sello, con una doble parada a Diabaté y Ndukwu, a bocajarro. También paró con solvencia y duro disparo de Gordon, de fuera del área. En eso nada ha cambiado. Hay portero. Y de los buenos.
