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BARCELONA 2 (5) - TOTTENHAM 2 (3)

Arthur reina en un debut más que prometedor

El brasileño, que marco un golazo, fue el mejor de un Barça en el que Lenglet cumplió con solvencia y Malcom marcó el penalti decisivo.

El Barcelona celebra uno de los goles
El Barcelona celebra uno de los goles FERRAN ZUERASDIARIO AS

Cillessen. Solvente. Volvió a dejar claro que la portería es el menor de los problemas del Barcelona. Muy bien con los pies y espectacular a un lanzamiento de falta de Eriksen. Decisivo en la tanda de penaltis. En la segunda parte fue víctima de la inexperiencia de su defensa.

Semedo. Potente. Desplegó su velocidad en varios contragolpes y se sumó con potencia al ataque. Perfecto en las correcciones cuanto le tocó correr hacia atrás.

Marlon. Dubitativo. Se lió un par de veces con la pelita y acabó cediendo saques de esquina para no complicarse. Se centró en la marca y le dejó la salida del balón a Lenglet.

Lenglet. Adaptado. Parece que lleve varias temporadas en el Barcelona. Dio sensación de seguridad en todo momento y sacó la pelota con jerarquía y criterio.

Miranda. Prometedor. En edad juvenil todavía, no desentonó como lateral izquierdo. No se dejó intimidar por los ingleses e incluso se proyectó en ataque. Atentos con este jugador.

S. Roberto. Líder. Jugó como mediocentro y fue el motor del Barcelona. Perfecto al incrustarse entre los centrales. Mostró buen entendimiento con Lenglet y con Arthur.

Arthur. Espectacular. Debutó a lo grande con un gran gol con un tiro desde fuera del área. Estupendo en la interpretación del juego para dar salida al balón. Siempre se ofreció al compañero. Juega muy fácil.

A. Gomes. Fracasado. Duró apenas 20 minutos sobre el campo a causa de una sobrecarga. En ese tiempo no demostró nada. En su línea.

Rafinha. Luchador. Un jabato por su banda. Incansable en la pelea tanto con pelota como sin ella. Participó en los dos primeros goles. Se le ve motivado. Ya sea para quedarse o a modo de escaparate.

Munir. Peligroso. Demostró lo que ya se sabía de él. Es un jugador con gol y oportunista. Aprovechó a oportunidad ante el cásting que tiene con Paco Alcácer para ver cual de los dos se queda.

Denis. Flojito. Tuvo su oportunidad para marcar pero falló clamorosamente antes de que un pinchazo en los isquios le obligara a retirarse al cuarto de hora de partido.

C. Pérez. Salió por Denis y se dedicó a guardar la posición y a asociarse sin arriesgar balones. Sufrió al jugar en una posición en la que no está acostumbrado.

R. Puig. Listo. Entró en el sitio de A. Gomes y no quiso complicarse la vida. Jugó a un toque y se asoció para dar salida al balón y ayudar a sus compañeros. En la segunda parte se soltó con detalles de gran calidad.

Palencia. Luchador. Todo carácter, el lateral canterano fue el primero en marcar de penalti en la tanda. Pundonoroso y sacrificado.

Cuenca. Tierno. Un error suyo propició el primer tanto del Tottenham. Se pudo rehacer y a partir de entonces ya no se complicó en defensa y optó por ser más expeditivo que vistoso.

Mingueza. Superado. Al igual que Cuenca, sufrió en la segunda parte cuando los ingleses apretaron. En el segundo gol trató de salvar el balón en la línea, pero el rechace le cayó a la delantera inglesa.

Cucurella. Generoso. Se vació en su lateral con constantes carreras, pero también lo pasó mal, especialmente cuando le encaró Eriksen.

Munchu. Desacomplejado. De los destacados en la segunda parte. Le sobra personalidad y tiene calidad. Organizó un par de contragolpes, cortó el juego con faltas en los momentos comlicados y no le tembló el pulso en los penaltis.

Collado. Aseado. No se complicó. Trató en todo momento de mantener el balón, pero el Tottenham le hizo defender más de lo que ñel está acostumbrado.

Malcom. Decisivo. Dejó detalles de gran calidad. Tuvo una oportunidad y dio dos pases de tacón que entusiasmaron al público. Marcó el penalti decisivo. Pagó el hecho de jugar rodeado de un equipo tan inexperto y joven.

Abel Ruiz. Aislado. En la segunda parte, cuando los ingleses dominaron el juego, el delantero valenciano fue un islote perdido en ataque. Eso sí, en la tanda de penaltis cumplió dejando huella de su enorme calidad en el golpeo.

Ballou. Vertical. Salió en los últimos minutos y desatascó al equipo con sus conducciones. Descarado y siempre en busca de la portería. A punto estuvo de marcar un gol.