Revolución Milán: Leonardo llega, Bonucci quiere la Juve y el Chelsea va a por Reina
Leonardo, anunciado este miércoles como director deportivo, podría revolucionar el equipo. Gennaro Gattuso no tiene su futuro asegurado como entrenador.
El Milán de Elliott quiere empezar de cero. En todos los sentidos. Los nuevos dueños rossoneri ya modificaron radicalmente la directiva y también piensan en revolucionar la plantilla. Sin el consejero delegado Fassone (cuyo adiós probablemente acabará en los tribunales) ni el director deportivo Mirabelli, ahora el club ha puesto las riendas de su área deportiva en las manos de Leonardo, que ha sido anunciado este miércoles y ya se ha puesto a trabajar.
Su primera negociación ha causado desconcierto en Italia: Bonucci, que llegó hace apenas un año por 42 millones, quiere volver a la Juventus y la Vecchia Signora le abría las puertas a su hijo pródigo. En cambio, a los milaneses llegaría Mattia Caldara, defensa de siete años más joven. Además, los equipos también empezaron a hablar del traspaso de Higuaín, mientras que en Italia aseguran que Antonio Conte sustituirá al técnico Gattuso en el próximo curso o en este, si será posible.
Sin Mirabelli, cuya relación con el agente Mino Raiola era complicada, ahora la continuidad de Donnarumma parece más probable. Y, por eso, el Milán podría estar pensando en desprenderse de Pepe Reina, que acaba de llegar como agente libre. Maurizio Sarri con el español tiene una relación espectacular dentro y fuera del campo, y estaría encantado de volver a contar con él en el Chelsea, después de su aventura napolitana.
Los ingleses perderán pronto a Courtois y el ex del Liverpool está en la lista de posibles sustitutos: sin embargo, según pudo saber AS, en este momento el guardameta aún no recibió llamadas desde Londres y parece complicado que su aventura milanista acabe, básicamente, antes de empezar. Reina llegó a Milán con ilusión y ganas de quedarse (firmó hasta 2021) y su familia ya organizó su nueva vida en el norte de Italia. Eso sí, en el mercado nada es imposible. Y mucho menos en este.
