El barco de Coentrao rescató a 15 pescadores que se hundieron
La embarcación Vitória Coentrão, propiedad del futbolista del Real Madrid y llamada así en honor a su hija, salvó a 15 hombres que estaban a 18km de tierra.
Fabio Coentrao es de orígenes humildes. Creció en Caxinas, un barrio de pescadores de Vila do Conde (pequeña ciudad al norte de Oporto) en el seno de una familia dedicada al mar. El año pasado invirtió en el negocio familiar de toda la vida y se compró una embarcación a la que bautizó como 'Vitoria Coentrao'. En la madrugada del miércoles al jueves, el puerto de Aveiro, recibió la llamada de auxilio de la embarcación 'Cristo es compañero', que se estaba hundiendo a 18 kilómetros con 15 pescadores faneando la sardina. "Los hombres fueron todos rescatados por la embarcación 'Vitória Coentrão', que pertenece al hermano del capitán de la embarcación y que acudió al rescate porque estaban cerca de su ubicación", explicó José Festas, responsable de seguridad del puerto de Aveiro, al periódico Correo da Manha.
De momento es la única 'aparición' de Coentrao este verano. El futbolista, al que todavía le queda un año de contrato en el Real Madrid, se encuentra en paradero desconocido. El Madrid no le quiere y su agente, Jorge Mendes, tiene verdaderas dificultades para encontrarle una salida.
Situación deportiva: no encuentra salida
Este es el quinto verano consecutivo en que el club no sabe qué hacer con él después de que Mourinho propiciara su renovación hasta 2019. Es el eterno marrón del mercado de verano. El club no le quiere y ningún equipo muestra interés por su elevada ficha (cuatro millones de euros netos). Lopetegui ni lo quiso ver de corto a diferencia del resto de cedidos. No está por Valdebebas, ni se le espera. El club le ha dicho a su agente, Jorge Mendes, que le busque una salida. Forma parte del stock fuera de catálogo. Por eso es difícil colocarle en algún sitio ya no por su ficha sino por su interminable historial de lesiones, molestias recurrentes y capítulos extradeportivos como el del cigarrillo.
Tres años se lo tuvo que quedar el Madrid sin que en ninguna de esas temporadas jugase más de 10 partidos. Y cuando se marchó cedido acabó en fiasco: primero en Mónaco, en la 2015-16 (20 partidos), y después en el Sporting, en la pasada temporada por más que jugara 44 partidos (el club lisboeta sólo se hizo cargo del 10% de la ficha y en abril el presidente del Sporting estuvo a punto de mandarle de vuelta). La posición del jugador y su agente en Concha Espina es ahora mucho más débil tras el adiós de Cristiano y Pepe. Sin protección en el vestuario, completamente devaluado y habiendo alcanzado ya la treintena, el Madrid asume que no habrá forma humana de recuperar los 55 millones que costó (30M€ de fichaje y 25M€ de sueldo) y se resigna a liberarlo gratis. Pero el problema es que nadie pagar por lo que has regalado en los últimos años...
