Torreira, el centrocampista perfecto para Tabárez

Lucas Torreira se ha presentado al mundo. En octavos de final se ha visto su mejor versión en este Mundial. Una exhibición ante Portugal en la que logró secar a Cristiano Ronaldo y ser uno de los mejores uruguayos sobre el césped. Es cierto que también realizó un buen partido ante Rusia, pero la exigencia a la que le han sometido los portugueses ha sido mucho mayor.

El trabajo realizado se ve refrendado en los datos. Ha despejado 4 balones, bloqueado 4 disparos y ha realizado dos intercepciones. En un contexto de encuentro en el que Uruguay ha sido un equipo menos protagonista ha sacado a relucir su magnífico conocimiento táctico para bloquear líneas de pase a Portugal. Eso y, además, mantener a Cristiano Ronaldo sin protagonismo.

Pese a ser un jugador menudo (1,68m) no se esconde a la hora plantar cara al contrario . Es capaz de enfrentarse a quien sea y robarle el balón como sea. Lo ha demostrado a la hora de trabar a un rival con la cabeza. "La entrega hasta el final en cada pelota, como todo uruguayo, es parte del equipo. Tenía las dos piernas acalambradas, pero tenía que seguir, no quedaba otra. No se nos podía escapar el triunfo” ha comentado después del encuentro.

A eso se le añade una gran precisión en el pase. Ha errado sólo cuatro durante su actuación en Sochi. Su inclusión en el once ha terminado de darle un salto de calidad al equipo. Al formar un rombo con Bentancur como enganche y él como pivote, Tabárez ha ganado una mejor gestión de la posesión sin perder orden.

Carlo Osti, director deportivo de la Sampdoria, confirmaba hace unos días su marcha al Arsenal de Unai Emery. Un jugador sobre el que formar un centro del campo seguro y estable. El trabajo sucio en Uruguay tiene un nombre: Lucas Torreira.