Rubi conocerá a Chen este sábado en China
El nuevo entrenador del Espanyol viaja con Perarnau. Antes lo habrán hecho Guasch y Mao. En Guangzhou se concretará la planificación 2018-19: salidas y fichajes ligados a la economía.
El Espanyol 2018-19 se definirá en China. A priori, no se trata de una gran novedad, puesto que el presidente y propietario es natural del gigante asiático, donde también reside. Pero es que la afirmación es literal: la cúpula del club se traslada a Cantón para cerrar, en los próximos días, la planificación de la próxima temporada.
El viaje se dividirá en dos partes. Este jueves parten el director general corporativo, Roger Guasch, y Mao Ye Wu, consejero responsable del área internacional y director de Coordinación de Gestión y Negocio. El sábado lo harán el director general deportivo, Óscar Perarnau, y Joan Francesc Ferrer 'Rubi', quien de este modo conocerá personalmente a Chen, tres semanas después de oficializarse su fichaje. Por un lado, el encuentro servirá para estrechar lazos entre dos metodologías de trabajo: las de las oficinas del Espanyol en Cornellà y en Guangzhou. Por otro, y más importante, para establecer las bases del club en las dos próximas temporadas.
Liquidado prácticamente el ejercicio 2017-18 con los 17 millones de euros que necesitaba ingresar el club en traspasos (Gerard Moreno, Marc Navarro y Javi Fuego cumplieron con ese montante), la expectativa radica en la cantidad de ventas que se precisarán este verano, como la de Aarón Martín, y en qué fichajes se reinvertirá el 50 por ciento de ese dinero (el resto irá a devolver deuda y a mejorar otros apartados de la entidad). Borja Iglesias, del Celta, es el principal deseado para cubrir la sensible baja de Gerard, mientras que aspira el área deportiva a hacerse al menos con algún jugador de banda y un mediocampista.
Otro de los puntos calientes que se deben solventar en China es cómo mantener la columna vertebral del equipo. En el Espanyol son conscientes de que llegarán ofertas por David López y por Sergi Darder, por lo que cabe unificar criterios y acordar si solo se les permitirá salir por sus respectivas cláusulas de rescisión o si, por el contrario, se aceptarían propuestas por un importe menor. Todo condicionado por un lado a la rebaja de la masa salarial (de los 60 a los 50 millones, a lo que ha contribuido la reciente liquidación de José Manuel Jurado) y, por otro, al calendario de pagos contraído con Rastar Group.
Sin dejar de lado el aspecto económico, que todo lo impregna por la situación del club, en las sucesivas reuniones muy probablemente salga a relucir el espinoso asunto de la campaña de renovación de abonos, que con aumento medio de 50 euros por carnet ha suscitado un rechazo pocas veces visto entre la masa social.
