Pedro, el salvador del Juvenil de Guti, jugará en el Castilla
El delantero, que anotó el gol que permitió al Madrid clasificarse para la final de la Copa del Rey juvenil, será uno de los jugadores que ascenderá al filial de Solari
Madrid
Si hay un artífice para la presencia del Madrid Juvenil de Guti en la final de Copa del Rey de este domingo (18:00 horas, GOL), ése es Pedro Ruiz. El espigado delantero sevillano, de 1,97 metros de altura, marcó el gol que abortó la remontada del San Félix malagueño en la vuelta de semifinales (4-1). Ya en la ida, había anotado dos goles y dado otros dos en la goleada de Valdebebas (6-1) que encarriló el pase. En la final, ante el Atlético de Manolo Cano, será la punta de lanza del vigente campeón copero, que aspira a revalidar título.
Pedro (Sevilla, 30 de marzo del 2000) se incorporó a la disciplina madridista en agosto de 2015, procedente del Real Betis, en cuyo fútbol base pasó siete años. Tras solo una temporada en el Cadete A, a las órdenes de Santiago Sánchez, subió al Juvenil B entrenado entonces por Guti. Luego, de la mano del ex 14 blanco, ascendió al Juvenil A, en el que se ha consolidado como el delantero titular. Su siguiente paso está cantado: el curso que viene, a sus 18 años, será parte del Castilla de Solari, que volverá a pelear por ascender a Segunda División.
Si por algo destaca el andaluz es por su poderío aéreo, gracias a sus casi dos metros, aunque muestra buenas maneras, pese a su talla, con el balón en los pies; lo demostró en la ida de semifinales, con dos asistencias. Él mismo se define como “un jugador de área”. Pero es mucho más que eso: no escatima compromiso defensivo y saca un gran disparo con su diestra. Estas cualidades le han permitido debutar con el Castilla esta misma temporada, ante el Rápido de Bouzas (luego jugó dos partidos más, uno de titular y completo), y también con la Selección Sub-19, en la Ronda Élite de clasificación para el Europeo de la categoría en Finlandia. El curso que viene Pedro será, junto a Gelabert o Fran García, parte de la base del filial blanco.