Mara, la abuela Oblak de la ya villa rojiblanca de Sokoliste

Los éxitos deportivos de los Oblak, tanto de Jan, el portero del Atlético, como de Teja, su hermana y jugadora profesional de baloncesto, son seguidos con mucho interés desde la pequeña localidad de Sokoliste. Enclavada al norte de Bosnia-Herzegovina, muy cerca de la frontera con Croacia esta villa es ya un pueblo colchonero más. Celebró, como todos, el reciente éxito del Atlético en la Europa League. La razón no es otra que la presencia de Mara, la abuela por parte materna de Jan y Teja. Hasta Sokoliste se desplazó hace unos días la cadena de televisión bosnia RTRS para averiguar "por qué en este pequeño pueblo todos apoyan al Atlético". Y allí se encontraron a Mara, la abuela de Jan y Teja que les relató detalles simpáticos y humanos del portero del colchonero.

Oblak, quien tuvo que marcharse siendo casi un niño a Portugal para progresar en su carrera en el fútbol no pierde ocasión, en cuanto puede para volver a ver a los suyos. Es asiduo de Skofja Loka, donde estos días se celebra el tornero de fútbol base que lleva su nombre, pero tampoco descuida la relación con sus familiares, aunque tenga que llegar a sitios tan apartados como Sokoliste. "Aquí todos lo conocen y a Teja también", relata Mara, su abuela orgullosa, señalando que Jan "viene cada verano y siempre duerme en mi casa, que es pequeña, pudiendo hacerlo en la de su tía que es más grande y confortable, pero él dice que prefiere estar conmigo, es muy amable y gentil". Es la visita obligatoria de Jan, antes de desplazarse a las localidades costeras. Los Oblak, Jan, sus padres y hermana, siempre hacen una parada en Sokoliste durante sus vacaciones y duermen en casa de la abuela. Mara relata un ofrecimiento que ha rechazado. "Me dicen que con el salario de Jan podrían construirme una casa, pero yo me he negado, estoy bien así y no necesito más, sería para mí un pecado pedirle dinero", se sincera.

Oblak, en la mira de Liverpool y PSG.

Mientras algunos de los clubes más importantes del mundo, como el Liverpool o el PSG, se agolpan a su puerta para intentar que Oblak fiche por ellos, el portero esloveno da muestras de su humildad entre los más cercanos, recordando sus orígenes. "Es normal que aquí todos apoyen al Atlético, aman a Jan y lo admiran", explica Mara a las cámaras con las fotos de sus nietos en las manos. Oblak no ha podido disputar el Mundial, Eslovenia no se clasificó y estos días descansa y atiende también compromisos. Inmerso también en actividades solidarias en Skofja Loka y, recientemente, involucró a Torres y a Griezmann en el proyecto de su fundación Play with us por los niños eslovenos.