Volgogrado, en alerta por el choque entre rusos y hooligans
Se esperan más de 20.000 ingleses en el debut de los 'pross' ante Túnez este domingo. Preocupan posibles enfrentamientos como los de Marsella en la Euro.
La paz de Volgogrado se está viendo perturbada con la presencia de miles de hinchas ingleses para el debut de la selección que dirige Southgate ante Túnez este domingo. Se calcula que más de 20.000 aficionados, algunos de ellos 'hooligans', acudirán al estadio para ver en directo a su equipo. Muchos de ellos ya se han dejado ver por las calles y han puesto en alerta a las autoridades rusas. El número de agentes policiales y militares se ha reforzado para evitar cualquier incidente. En el recuerdo están aún las gravísimas peleas con ultras rusos en Marsella en el estreno de la última Eurocopa de Francia, cuando el mundo del fútbol y la sociedad en general se escandalizaron por las imágenes de violencia y caos que dieron la vuelta al mundo. Aquello, por duro que suene, aún se considera un primer asalto por parte de los implicados.
En los últimos meses han circulado por la red vídeos de los ultras rusos haciendo ejercicios de combate en los bosques del país. Son casi entrenamientos paramilitares. Los cuelgan ellos mismos y, lo más preocupante, hacen alusión a los ingleses a la hora de titularlos: "Preparándonos para la llegada de los 'hooligans'", anunciaba uno colgado hace solo unos días por los miembros más radicales de la hinchada del Spartak.
Esa llegada inglesa se está produciendo a cuentagotas y desde hoy será masiva. Recientemente el gobierno ruso anunció que no permitirá la entrada a 1.200 aficionados "fichados" por haber teñido incidentes con sus clubes o con la selección en eventos anteriores. La creación de un Fan ID con el que saber exactamente el nombre y hasta los antecedentes de quienes van a los estadios ha ayudado bastante a hacer una primera criba. Pero se necesitan más, empezando por los propios rusos. Por eso es mejor estar alerta como desde hoy lo estarán los cuerpos de seguridad en Volgogrado. La cuidad que vivió una de las más cruentas batallas de la II Guerra Mundial cuando se llamaba Stalingrado no quiere ser una nueva Marsella. Ciudades víctimas de la barbarie ultra.